Uno de los géneros más consumidos en las películas para adultos, tienen que ver con el sexo lésbico. Sin embargo, como lo muestran no necesariamente es un espejo de cómo se practica en la vida real.
Por ello, aquí te presentamos los mitos más comunes alrededor del sexo lésbico creado por las películas eróticas y para adultos.
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1. Las actrices con uñas muy largas al parecen son un estereotipo en las películas para adultos. Sin embargo, durante el sexo lésbico este tipo de uñas pueden ser muy inconvenientes porque favorecen que se lastime el delicado tejido de la zona genital, generando micro heridas que después pueden infectarse rápidamente.
2. Otra mentira está relacionada con el vello púbico. Los genitales de los hombres y mujeres lo tienen por igual. Sin embargo, en las películas para adultos las actrices lucen totalmente depiladas. Lo que muchos ignoran es que depilarse esa zona puede ser muy doloroso. Además, el vello púbico cumple la función entre otras, de favorecer el orgasmo al brindar un estímulo extra durante el frotamiento.
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3. El sexo lésbico retratado en el cine para adultos por lo general se decanta en gran parte por el sexo oral, cuando en realidad intervienen muchos otros elementos como la masturbación con las manos y el uso de juguetes sexuales, por citar algunos.
4. El sexo entre dos mujeres puede ser rudo e intenso y no lento como se acostumbra ver en las películas para adultos. También puede incluir jalarse el pelo, morderse el cuello e usar charla erótica de alto voltaje.
5. Para hacerlo más excitante las películas para adultos exageran con los gemidos durante el sexo lésbico, mucho más que en las cintas de sexo heterosexual.
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6. El sexo lésbico real enfrenta un problema que en las películas para adultos no se ve: el cabello. Durante una sesión de sexo intenso es normal que el cabello caiga sobre el rostro y hasta dentro de la boca enredándose en la lengua. Por ello, las parejas lesbianas optan por amarrárselo en colas de caballo, algo que no se estila en las películas eróticas.
7. El sexo lésbico al incluir el frotamiento de los genitales, genera curiosos sonidos. Esto en las películas para adultos no se ve o se camufla con música u otros efectos sonoros.
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