Una de las enfermedades más comunes debido a los cambios de temperatura y el invierno es la amigdalitis aguda debido a que los virus aumentan en esta época.
Según el médico otorrino de la Clínica Internacional, Manuel Cuadra, a diferencia de los adultos mayores, este mal es más frecuente en niños, de 3 a 7 años.
“Pese a estar enfermos, los niños son enviados al colegio, ello hace que el contagio se propague mucho más rápido”, refirió el galeno.
Por eso, aconseja que cuando el escolar tiene un cuadro viral debe quedarse en casa por lo menos dos días. Esta enfermedad es una inflamación de las amígdalas, las masas de tejido carnoso que cuelgan a ambos lados de la parte posterior de la garganta, cuya función consiste en ayudar a luchar contra los gérmenes que entran en el cuerpo a través de la boca.
El dolor de garganta es uno de los síntomas más comunes de esta enfermedad. Además se suele presentar fiebre, más de 38 grados de temperatura.
Otra cosa muy común es sentir malestar general y dificultad al pasar las comidas. Si hay dolores articulares se trata de una amigdalitis crónica.
Amigdalitis aguda. La viral es la más frecuente y es causado por diversos virus de tipo respiratorio.
También está la bacteriana. Se trata de una infección sobreagregada que producen malestares como fiebre.
No obstante, la amigdalitis crónica está asociada a un germen llamado estreptococo beta hemolítico. “Este caso es distinto porque se producen por más de 3 a 5 episodios de infecciones al año”, aseveró Manuel Cuadra.
El peligro de la amigdalitis crónica es que puede producir la famosa fiebre reumática, que puede dañar el corazón, riñones e incluso el cerebro.
Las gotas de Fluggë son las responsables de la proliferación de gérmenes que te pueden enfermar a ti y a los de tu entorno.
Una persona infectada al hablar puede producir un contagio desde los 2 metros, si estornuda desde los 5 metros y, si tose, desde los 7 metros.
En caso de una amigdalitis viral, si la fiebre no es mayor de 38 grados y no presenta mucho malestar, se recomienda tomar un paracetamol cada seis horas. Pero si la fiebre es mayor de 38 e incluso tiene dificultad para pasar los alimentos, eso significará que está pasando por un cuadro bacteriano y lo mejor será consultar con un médico para que le recete algún antibiótico. Para evitar contagiar al resto, lo mejor será guardar cama. No obstante, como medida de prevención, todo lugar debe estar muy bien ventilado. Y si ya presenta la enfermedad se aconseja tomar bebidas calientes, tener una adecuada nutrición, consumir vitamina C será de mucha ayuda.
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