En Estados Unidos, el biólogo evolutivo Kory Evans, de la Universidad de Rice, encontró un aterrador hallazgo al interior de la boca de un pez. Se trata de un parásito conocido por los expertos como piojos comelenguas, que se alimenta del órgano del animal hasta provocar su muerte.
Según informó CNN, el parásito exactamente no se ‘come’ la lengua de su víctima, sino succiona su sangre del tejido hasta secarlo y degenerarlo, para luego hacerse pasar por este órgano y sobreviviendo a través de la mucosidad secretada por el pez.
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“Los parásitos ingresan furtivamente a través de las branquias de un pez, se posan en su lengua y cortan los vasos sanguíneos allí. El piojo se alimenta de esa sangre hasta que la lengua muere y, de hecho, reemplaza la lengua”, dijo el biólogo de EE.UU. al medio citado.
Asimismo, el animal vertebrado podrá continuar viviendo con el parásito dentro y siguiendo su alimentación con normalidad, pero tarde o temprano a acabará muriendo. “De hecho, hay muchos ejemplos de peces que sobreviven a sus parásitos isópodos, ya que pueden permanecer adheridos al pez durante varios años, crecer a medida que el pez crece y luego desprenderse”, explicó Stefanie Kaiser, del Instituto Nacional de Investigación del Agua y la Atmósfera en Wellington, Nueva Zelanda.
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Cabe resaltar que el programa de naturaleza de larga duración de PBS, NOVA, señaló que los piojos comelenguas prefiere el pargo, pero el sorprendente hallazgo de Evans hizo que varios especialistas se cuestionaran que hacía en un lábrido vegetariano.
“Los piojos comelenguas no son un hallazgo común en las tomografías computarizadas y no se sabe qué tan comunes son entre los peces. Este es el primero que encuentra en un escaneo”, afirmó el reconocido medio en base al impactante descubrimiento.