El Gobierno de China ha reportado un nuevo brote de coronavirus en Heilongjiang, provincia ubicada al noroeste del país asiático, según han informado, todos los casos corresponden a ciudadanos chinos que ha regresado del extranjero.
La ciudad china de Harbin, capital de la provincia de Heilongjiang, amenaza con convertirse en el nuevo Wuhan, tras encontrarse nuevos casos positivos del mortal COVID-19 relacionados con sus ciudadanos.
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"Debemos prestar especial atención al brote de Harbin, aunque parezca pequeño, porque tiene una larga cadena de contagios que ha dejado al descubierto nuevas características del coronavirus", advirtió en declaraciones al diario 'Global Times', el epidemiólogo jefe del Centro de Prevención y Control de Enfermedades de China, Zeng Guang.
China, ante el temor de una segunda ola de COVID-19, ha reforzado sus medidas de prevención ante la pandemia y ha ordenado restricciones severas para todos los extranjeros, asimismo, ha reducido los vuelos internacionales el ingreso de viajeros.
Por su parte, el Ministerio de Relaciones Exteriores de China se ha pronunciado respecto al rebrote de la enfermedad y ha recomendado a sus ciudadanos a permanecer en el país y evaluar el riesgo "grave" de infección si deciden viajar.
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“Los que están en China deben abstenerse de viajar al extranjero, mientras que los que ya están en el extranjero deben evitar los viajes transfronterizos”, recalcó el ministerio, indicó el ministerio. Hasta la fecha China ha reportado 82,758 casos confirmados de coronavirus y 77,123 personas recuperadas, en tanto, la cifra de muertes descendió a 4632.