Este domingo, el presidente de Argentina, Alberto Fernandez, ha anunciado el cierre de fronteras en el país. Lo estableció luego de una reunión de varias horas con los miembros del Gobierno debido a la pandemia del coronavirus.
"Durante los próximos 15 días nadie podrá ingresar al país salvo los argentinos y extranjeros residentes", dijo el mandatario argentino. Aclaró que esta medida es para las personas que quieran ingresar a Argentina; sin embargo, no aplica para las que quieran salir del país, estas pueden hacerlo sin ningún problema.
Asimismo, Fernández ha resaltado la necesidad que los ciudadanos tengan una conciencia de responsabilidad social.
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"Todos tenemos que tener conciencia de que el virus nos puede atacar a nosotros y que nosotros podemos dañar al otro", recalcó y ha reiterado que "el modo solidario es cuidarnos a nosotros para cuidar a los otros".
El presidente ha advertido que va a ser “inflexible” con las personas que tengan que permanecer en cuarentena pues lo deben de cumplir obligatoriamente. "Y si no la cumplen vamos a ocuparnos de perseguirlos penalmente", expresó Fernández.
Por otro lado, el mandatario tomó la decisión de suspender las clases de todos los sectores educativos desde el 16 hasta el 31 de marzo, "con la idea de hacer algo para evitar la circulación del virus en menores".
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"Los niños muchas veces son portadores y terminan contagiando a familiares y adultos", explicó el presidente.
No obstante, precisó que los colegios seguirán abiertos para atender otras "obligaciones colaterales como dar el alimento a muchos chicos".
Hasta el momento en Argentina se han registrado 56 casos confirmados de personas infectadas con coronavirus, así lo informó el Ministerio de Salud de Argentina.