Ciudad del Vaticano. A fin de colaborar con la justicia y acabar con el silencio cómplice, el Papa Francisco dispuso abolir el secreto pontificio que impedía que jueces y fiscales accedan a las actas de los procesos canónicos, para conocer las denuncias contra los curas en casos de abuso sexual.
Los líderes eclesiásticos deben proteger la información en casos de abusos para garantizar su “seguridad, integridad y confidencialidad”, afirmó el pontífice en un nuevo documento.
LEE MÁS: 2020: Los acontecimientos más importantes para el nuevo año
Sin embargo, el “secreto pontificio” ya no se aplica a las acusaciones, juicios y decisiones tomadas dentro del derecho canónico de la Iglesia católica en casos de abusos.
En este caso, los cambios afectan a los abusos sexuales a menores o personas vulnerables cometidos por sacerdotes, obispos o cardenales. El peor castigo que puede recibir un sacerdote dentro de este sistema es ser expulsado del clero.
MIRA TAMBIÉN: El papa Francisco planea incluir un nuevo pecado en el catecismo
Revisa todas las noticias escritas por el staff de redactores de El Popular.