Miguel Rebosio Compans (46) cuando se ponía la camiseta nacional era todo garra y pundonor. Su palabra es autorizada y hoy que Perú juega con la favorita selección de Brasil, pide que la número 12 juegue en el Estadio Nacional su partido aparte y afirma que un empate es un buen resultado para nuestro equipo.
En el túnel del tiempo, el Conejo recuerda los empates conseguidos ante el Scratch para las eliminatorias de Corea-Japón 2002 y Alemania 2006, al tiempo que reconoce que no le motivó cambiar camiseta con los monstruos Ronaldo, Rivaldo ni Romario, a quienes tuvo al frente.
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—¿Cuál es tu opinión respecto al encuentro de mañana (hoy) con Brasil?
—Los partidos con Brasil como con Argentina son dificilísimos, pero más recuerdo los que jugué con el Scratch, porque siempre tiene en sus equipos cracks. En este caso, Neymar es el abanderado y a quien debemos anular.
—¿Desde tu experiencia, cómo llega Perú?
—Perú viene con una lista de convocados que fueron cayendo de a poco y dentro de esos 9 jugadores principales, están varios de mejor funcionamiento con Reynoso, así que ahora está echando mano de chicos que tienen que dar la cara en este momento.
—Se ha escuchado cuestionamientos a Reynoso por el equipo que presentó ante Paraguay, ¿qué puedes decir al respecto?
—La gente que se olvide de lo anterior, esta es una nueva eliminatoria con un cuerpo técnico peruano y que los chicos sientan ese aliento y apoyo a Reynoso. Un punto en Ciudad del Este no es malo, porque a la larga de las eliminatorias, te va a servir.
—Tú jugabas de defensa, con esa experiencia, ¿qué debe hacer la de esta fecha para no ser sorprendidos?
—Es un partido difícil. Yo creo que Juan suele construir sus equipos defensivamente para mantener el cero en nuestro arco y, con ese respaldo, ir por el arco contrario. Después, las pocas oportunidades que se puedan crear hay que marcar. Me gusta la posibilidad de que Renato Tapia juegue de central y Cartagena vaya al mediocampo.
—Corzo aparece como reemplazante de Advíncula, ¿qué te parece?
—No me disgusta, porque es un jugador puro corazón y puro huev..., que mete y contagia al equipo. Pero no hay que descartar a Araujo. Para mí la zaga sería con Corzo, Tapia, Callens y Marco López si Trauco no se recupera.
—Sería iluso no dar como favorito a Brasil, por tanto, ¿un punto sería bueno o perdemos dos?
—Brasil, donde vaya, siempre va a ser favorito, entonces somos conscientes que Perú se enfrenta a uno de los favoritos no solo de las eliminatorias sino para el Miundial 2026. Un punto sería buenísimo. La gente que no se olvide que para las eliminatorias para Qatar 2022, Perú tenía apenas un punto en cuatro partidos, ahora podemos tener cuatro o dos. Perú tiene que hacer sentir que jugar en Lima no es fácil.
—Tuviste la ocasión de estar en el combinado nacional que le empató 1-1 a Brasil en São Paulo en el 2001, ¿qué recuerdos te han quedado?
—Recuerdo que Julio César Uribe, que era el entrenador en ese momento, decía que debíamos tener la fortaleza mental para disputar el partido. Y fue una gran noche de Miguelito Miranda. Los cambios que hizo Uribe dieron resultado. Tempone que fue quien dio el pase para que Pajuelo convirtiera el empate. Romario había anotado para Brasil.
—¿Cómo fue la marca a Romario y compañía?
—Nosotros ya teníamos varios partidos y lo enfrentamos con todo. Romario ya estaba en el epílogo de su carrera, pero tenía una calidad y nosotros hicimos nuestro trabajo para que no tengan su mejor versión y los incomodamos.
—¿Saliste muy concentrado?
—Son partidos que nos gustan y lo sueñas. Le iba con fuerza y gané muchas pelotas a los monstruos brasileños. Cuando llega el gol de Pajuelo, lo gritamos con el alma y se paralizó Brasil. Cuando terminó el cotejo todos nos abrazamos con nuestro comando técnico y dijimos: “Caramba, le empatamos a Brasil en su propia casa”.
—En el 2003 también estuviste en el empate 1-1 con el Scratch en el Monumental en Ate.
—Había un marco espectacular de 70 000 espectadores y fue nuestro empuje, nuestra mejor arma. Teníamos a Jayo adelante como una muralla y yo como central sentía tranquilidad y pudimos anular a Ronaldo.
—Perú empezó perdiendo y luego empató. Fue un gran resultado, ¿no?
—A Galliquio le cobraron un penal y nosotros nos fuimos encima del árbitro porque no lo era, además en ese tiempo no había VAR. Había confianza en el viejo Ibáñez, pero Rivaldo lo pateó bien. Nosotros estábamos jugando un gran partido y empatamos con gol de Solano. Sentíamos que el Monumental retumbaba y explotó. Fue un buen centro de ‘Chicho’ Salas y cabezazo de Nolberto. Una cosa es contarlo, pero vivirlo es diferente.
—¿Llegaste a cambiar camiseta con alguno de los cracks de la verdeamarilla?
—No, con ningún brasileño, porque no me gustaba hacerlo. No me gustaba buscar y molestar a nadie.
—Siempre se recuerda que dejabas la vida por la selección en la cancha.
—Es un orgullo haber vestido la camiseta nacional, porque no cualquiera viste la bicolor. Fueron 60 partidos oficiales entre muy buenos, buenos y malos, pero la gente me relaciona mucho con la selección y eso me enorgullece. No convertí goles. Me gustaba tirar las pelotas paradas, pero quitársela a Solano en ese momento, era una falta de respeto.
Periodista de Universidad Inca Garcilaso de la Vega. Vivo con el deporte y me gusta la música.