Héctor Chumpitaz y su lección de vida

Carlos Contreras

Más fuerte que un roble. Héctor Chumpitaz (76) hoy en el Día de Padre, es símbolo de los padres que luchan en la vida y que tuvo la fortaleza para derrotar junto a su esposa María Esther Dulanto al terrible coronavirus.

“Lo que me ha pasado no lo deseo ni a mi peor enemigo. Fui infectado por el virus a pesar que me cuidaba y no salía por ningún motivo de casa porque sabía que la pandemia era muy peligrosa”, señala el Capitán de América.

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Chumpi narró cómo vivió los días al saber que era positivo. “Cuando tuvimos los primeros síntomas del coronavirus mis hijos nos llevaron a hacernos la prueba de descarte, y nos dijeron que teníamos el Covid-19 y quedamos internandos en una clínica local”, apuntó.

El otrora defensor de la selección disfruta su presente tras pasar el susto. “A mis 76 años he vuelto nacer. Yo nunca estuve en una guerra, pero creo que el enemigo invisible es peor que mil guerras. Tuve momentos difíciles en mi vida, pero nada como esto. Felizmente todo salió bien, ahora estoy recuperándome y cumpliendo la cuarentena con responsabilidad al lado de mi familia y seres queridos”, indicó.

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CONSEJOS DEL CAPITÁN

Chumpitaz hizo una invocación a las personas. “Gracias a todos por preocuparse de mi salud. Espero que se cuiden porque soy un testimonio vivo de esta pandemia que ha dejado miles de hogares sin sus seres queridos. Esta enfermedad tiene que pasar. No hay que desesperarse, hay que seguir los consejos como lavarse las manos, distanciamiento social y usar mascarilla, ya que aún no se encuentra la vacuna”, remarcó.

El gran Capitán saludó a los padres del Perú en su día. “Les envío un afectuoso saludo a todos los padres del Perú y que se cuiden mucho, esto (coronavirus) no ha pasado. La vida no va ser la misma de ahora en adelante en el mundo. Con la bendición de Dios estaré con mi señora, hijos, nieto y bisnietas en casa”, finalizó.