MANCHESTER. El clásico de Manchester se selló con un afectuoso abrazo. Y es que los técnicos José Mourinho (United) y Pep Guardiola (City) dejaron de lados sus diferencias y saludaron al final del encuentro en el que los 'Citizens' derrotaron 2-1 a los 'Diablos Rojos'.
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Mourinho y Guardiola parecen haber dado un paso adelante en su relación. A pesar de las marcadas diferencias futbolísticas entre uno y otro, con recordados duelos accidentados cuando se cruzaron dirigiendo a otros clubes (Barcelona vs. Chelsea, o Barcelona vs. Real Madrid, por citar ejemplos).
Ahora los días de furia habrían llegado a su fin porque le pusieron buena onda en la semana, con mensajes positivos, y antes del partido se saludaron amigablemente en la previa al arranque del partido entre Manchester City y Manchester United.
Pero lo increíble vino después. Mourinho, con toda la bronca tras perder el derby, volvió a acercarse al banco de Pep y lo despidió con un efusivo abrazo.
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