De OnlyFans al Congreso: revelan que secretaria sin bachillerato gana casi 8 mil soles

Nuevas revelaciones han salido a la luz sobre la presunta red de prostitución clandestina que operaría al interior del Congreso de la República. Según informaciones publicadas, el principal implicado es Jorge Torres Saravia, conocido como ‘Coqui’, quien estaría involucrado en la organización de fiestas privadas con altos funcionarios y trabajadoras de su despacho. Estas reuniones se habrían realizado en departamentos alquilados a través de Airbnb, ubicados en distritos exclusivos como Barranco y San Isidro.

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¿Cómo habría operado Jorge Torres en el Congreso?

Según testimonios, Torres Saravia tomaba precauciones para evitar dejar evidencias, como instruir a sus invitados a no mostrar identificaciones al ingresar a las propiedades. Además, se reporta que ‘Coqui’ fotografiaba y grababa videos de los participantes, contenido que posteriormente compartía en círculos cerrados. Estas acciones habrían generado tensiones, incluyendo un altercado con un alto funcionario del Parlamento después de que una imagen comprometedora de éste se filtrara en un grupo de WhatsApp.

Otro dato relevante apunta a las aspiraciones de Torres Saravia para convertirse en procurador del Congreso. Para ello, habría renunciado a su puesto y presuntamente enviado a una trabajadora de su despacho a buscar apoyo en la oficina de un parlamentario. Sin embargo, su candidatura no prosperó, y dejó como sucesor a José Rubio, quien habría colaborado con la justificación de ausencias de las trabajadoras vinculadas al caso.

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Joven de OnlyFans trabaja en el Congreso

El nombre de Isabel Cajo Salvador también ha sido vinculado a este escándalo. La joven, conocida previamente por ofrecer contenido en la plataforma OnlyFans, habría participado en una de las fiestas organizadas por Torres Saravia y, posteriormente, ingresó a trabajar en el Congreso. Su salario inicial fue de S/4.700, el cual aumentó significativamente al ser asignada al equipo de ‘Coqui’. Actualmente, labora en el despacho del congresista Edwin Martínez, quien defendió su contratación en declaraciones públicas.

Martínez respondió a las críticas afirmando que el puesto de Cajo Salvador no requiere calificación académica específica. “Fue evaluada por el asesor y yo di el visto bueno. No me baso en rumores ni habladurías”, declaró el congresista. Además, resaltó su postura de apoyo hacia las mujeres y cuestionó los ataques recibidos por su gestión.