Su captura es solo cuestión de horas. Eso es lo que dio a entender Marco Collante, fiscal que viene investigando el caso de la desaparición de ciudadana mexicana Blanca Arellano y que tiene como principal sospechoso a Juan Pablo Villafuerte, quien cuenta con una orden de detención preliminar de 72 horas por los presuntos delitos de feminicidio, trata de personas y tráfico de órganos.
Asimismo, el representante del Ministerio Público, según Canal N, descartó que el estudiante de medicina haya salido del país y que viene siendo intensamente buscado por la Policía Nacional del Perú (PNP). De acuerdo al letrado, así lo pudieron corroborar a través de Migraciones y los diversos puntos fronterizos del territorio nacional.
Por otro lado, justificó la tardía solicitud de detención contra Villafuerte Pinto, aduciendo que "no tenían indicios contundentes" sobre su responsabilidad en el presunto feminicidio antes de las pruebas de luminol practicadas en la habitación que Juan Pablo alquilaba en Huacho, donde se confirmó el hallazgo de restos de sangre y cabello.
"Los primeros hallazgos que se hicieron fueron los días miércoles y jueves. Hasta ahí no se sospechaba de nada. […] Y hasta la fecha no tenemos los resultados científicos (de la prueba de luminol)", comentó Collante ante la prensa.
"El señor (Juan Pablo Villafuerte) fue citado el día lunes, la declaración ha demorado hasta las 4 de la tarde aproximadamente y recién en la noche hemos podido tener la certeza de cuál era el domicilio que tenía acá (en Huacho). Es por eso que el allanamiento se hace el día siguiente", agregó el fiscal.
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