El chofer Marco Antonio Zea Tupia que trasladó a dos sicarios para asesinen de ocho balazos al oficial de la Marina de Guerra del Perú, Artemio Raúl Cáceres Rosales, en octubre del 2019 en el Callao, continuará cumpliendo su condena de 22 años de pena privativa de la libertad efectiva.
La Sala Penal de Apelaciones Transitoria de la Corte Superior de Justicia del Callao ratificó la condena contra Marco Antonio Zea Tupia por ser cómplice primario del delito contra el cuerpo, la vida y la salud en la modalidad de homicidio calificado, en agravio de Artemio Raúl Cáceres Rosales y dispuso el pago de 50 mil soles de reparación civil a favor de los herederos de la parte agraviada.
Dicho tribunal integrado por los magistrados María Jessica León Yarango (presidenta), Armando Huertas Mogollón y Edie Walther Solórzano Huaraz, llegaron a comprobar que el inculpado Zea Tupia manejó el auto en el que iban sus dos cómplices, los otros dos coautores del delito, Kevin Levi Asin Panaifo y Kevin Josimar Farfán Meza, quienes actualmente cumplen condena tras admitir su responsabilidad y acogerse a la conclusión anticipada.
Asimismo, se determinó que Asin y Farfán coordinaron el asesinato contra Cáceres, siendo Farfán quien disparó ocho veces contra el agraviado. Mientras que el imputado Zea fue quien los llevó y sacó de la escena del crimen en un automóvil. La víctima falleció como consecuencia de un trauma cráneo encefálico y torácico abierto debido a perforaciones por arma de fuego.
De acuerdo a las investigaciones, en octubre del 2019, efectivos policiales de la comisaría de Márquez fueron alertados de un crimen cometido en el parque 1 de la urbanización Las Brisas de Oquendo. Al llegar, encontraron en una losa deportiva el cadáver del oficial de Marina de Guerra del Perú, Artemio Raúl Cáceres Rosales, como consecuencia de varios disparos contra su cuerpo, cuello y cabeza.
Tras revisar las cámaras de seguridad, pudieron ver que minutos antes del asesinato un auto circulaba sospechosamente alrededor del parque. Uno de los sujetos, quien usaba capucha, baja de la parte posterior del auto con la intención de ingresar al parque.
Al llegar a la losa deportiva donde estaba Artemio Raúl Cáceres Rosales, sacó de su cintura una pistola y disparó contra su cuerpo. La víctima intentó huir, sin embargo el asesino lo siguió y le disparó en su cuello y cabeza, dándose a la fuga y amenazando a los testigos para que no intervengan. El delincuente huyó con los otros dos cómplices.
Con esta información y con la placa del auto, la PNP fue en búsqueda del vehículo y lo halló en un domicilio en el pueblo joven Néstor Gambetta Oeste en el Callao, donde se intervino a Marco Antonio Zea Tupia, quien reconoció haber transportado a los otros dos cómplices.
Un testigo del crimen los identificó como Kevin Levi Asin Panaifo y Kevin Josimar Farfán Meza.
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