¡Casi pierde la vida! Tras liberarse a las ocho personas secuestradas pro los ronderos del distrito de Chilia, ubicado en la provincia de Pataz, La Libertad, una de las víctimas tomó valor para contar su terrible experiencia e indicó a un medio de comunicación que en todo momento la acusaban de haber hecho brujería a pesar de no tener ninguna prueba de sus palabras.
La señora María Ávila de Ramos, nunca imaginó ser agredida por los miembros de su comunidad, pese a que siempre mantuvo un comportamiento óptimo. Ella decidió armarse de valor y revelar a Exitosa, cómo actuaron los ronderos y qué le decían al culparla de hacer magia negra en el lugar.
“Me chicoteaban (pegaban) con el látigo y bailaban seis. Yo volteaba en el aire [...] Me sacaron de mi vivienda en horas de la madrugada y luego me llevaron contra mi voluntad hasta Carhuacocha, yo no era la única, fue una situación bastante desesperante”, manifestó.
“En Carhuacocha aseguraban que me iban a quemar. En Allaca, me castigaron cruelmente, yo creí que perdería la vida porque no tenía fuerzas. Los ronderos querían que dijera que era bruja, querían que diga algo que no era verdad. Me castigaban con sus correas, palos, bordones y luego vino los choques de electricidad”, agregó.
Se sabe que el Ministerio Público abrió una investigación preliminar contra los ronderos de Chilia, por el delito de secuestro y tortura a siete mujeres y un hombre. “Realizaremos la investigación de oficio en agravio de estas personas, solo hay dos denuncias al respecto”.
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