
Calculador, frío y sin mostrar arrepentimiento. Así se mostró Víctor Andrés Cano Merino, sujeto que secuestró a una niña de 8 años en La Molina durante la tarde del 21 de diciembre, al ser trasladado a la Dirincri de Lima.
Al bajar del auto policial, Cano, que fue capturado en una vivienda de la zona de Mariscal Cáceres en San Juan de Lurigancho, comenzó a reírse de la prensa y de la PNP y aseguró que no había dañado a la niña de 8 años.
Según las investigaciones, el presunto pedófilo alias “Triángulo” se habría hecho pasar por una mujer en las redes sociales y tras un mes de manipulación, el sujeto que trabaja como cobrador de combi, logró conversar a la niña de salir de su casa.
Al parecer lo habría calculado todo. El sujeto contó que llevó a la menor a Real Plaza de Puruchuco para ver una película. Sin embargo, la PNP cree que este sería su modus operandi para manipular a los menores y luego llevarlos a su casa en San Juan de Lurigancho.
Incluso los agentes de investigación indicaron el sujeto era un calculador. Luego de saber que lo estaban siendo buscando, lavó su ropa y eliminó información de su celular y computadora. Pero eso no impedirá a la PNP de hallar información valiosa.
Cabe detallar que el sujeto trató de dar muchas escusas del por qué había raptó a la niña, pero según los agentes del orden, Triángulo formaría parte de una red de trata de menores o parte de una red de pedofilia.
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