Alrededor de 60 representantes de los pueblos Shipibo, Cacataibo, Asháninka, llegaron a Lima para realizar una serie de protestas en distintos puntos de la capital y denunciar la invasión de sus territorios ancestrales por el narcotráfico, quienes están convirtiendo la zona del VRAEM en un nuevo foco de producción, procesamiento y transporte de cocaína.
También mostraron su preocupación por los posibles cambios en la Presidencia Ejecutiva de Devida, ya que advierten que ello agravaría aún más dicha situación porque se iniciará un proceso de debilitamiento del trabajo de erradicación de los cultivos de hoja de coca y, como consecuencia, incentivará la producción de más cultivos ilegales.
En ese sentido, esperan tener garantías de parte del Ministerio del Interior de que no se relajarán los operativos en sus territorios.
Por el contrario, esperan que la primera ministra, Mirtha Vásquez, fortalezca Devida y que escuche sus propuestas sobre cómo destrabar un millonario financiamiento, otorgado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) al Perú, para la titulación de comunidades indígenas.
Esto debido a que, el ministro de Agricultura, Víctor Mayta, les anunciara en una reunión que el proyecto ya no se iba a ejecutar y que debían esperar a que se rediseñe por completo, lo cual podría tardar años, mientras las invasiones del narcotráfico continúan.
Ante este panorama las comunidades indígenas han solicitado una reunión de emergencia con la primera ministra, para exigir una solución concreta a la crisis humanitaria que se vive en sus comunidades nativas, quienes sufren constantes amenazas, agresiones físicas graves, secuestros por parte de grupos de narcotraficantes.
Somos el equipo de actualidad de El Popular y tenemos las últimas noticias sobre el Gobierno de Pedro Castillo, el anuncio de nuevos bonos y cubrimos acontecimientos policiales de Lima y a nivel nacional.