Los huaicos y desbordes de ríos del "Niño costero" también golpean la salud mental de los damnificados. Es por eso que los psicólogos aconsejaron a los más de 2,500 damnificados expresar sus emociones de frustración y rabia, y no ocultar sus emociones.
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La salud mental se verá más afectada en el caso de los niños y madres gestantes damnificadas, ya que son los más vulnerables. La psicóloga Kira Soto Noria, de la Micro Red San Fernando de San Juan de Lurigancho, explicó que las personas tienen la capacidad de salir adelante ante la adversidad.
"Ante una situación difícil es normal sentirnos tristes, llorar, tener miedo o cólera, desesperanza, el no saber dónde ir”, expresó.
“Quizá muchos niños no van a querer despegarse de mamá, van a tener berrinches, no van a querer estar solos, no podrán dormir. Lo que se recomienda a los papás es tener mucha paciencia para poder hacer la contención emocional de los menores. Hacer una escucha activa, contacto visual, cogerlos de la mano, darles un abrazo, decirles que ellos están allí y los aman mucho. Eso les va a dar seguridad”, sostuvo la especialista.
La psicóloga Kira Soto, que también es rescatista, pidió a los papás no prohibir a sus hijos hablar de la emergencia o tragedia si el hacerlo los tranquiliza. Por el contrario, ayudarles con palabras a expresar lo que les da miedo.
“Si se tiene hijos adolescentes, hay que desarrollar mucha comunicación y no perderlos de vista, porque están en una situación vulnerable y pueden entrar contacto con personas indebidas” advirtió.
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