Un grupo de arqueólogos polacos realizaron un insólito hallazgo, debido a que en una de sus excavaciones lograron descubrir cientos de fosas de un cementerio medieval en Kaldus, Polonia, de los cuales hallaron 14 tumbas con evidencias de prácticas antivampíricas.
Según Forbes, los científicos hallaron dentro de estas tumbas a personas decapitadas, mientras que otras fueron sepultadas boca abajo. También lograron descubrir que la mayoría de cadáveres fueron aplastados con piedras.
Según el estudio, este tipo de entierros se practicaban contra los vampiros, pero también se solían usar con las personas que sufrían alguna enfermedad contagiosa.
Un grupo de científicos se encargó de la investigación más a fondo de los cadáveres, y llegaron a la conclusión que no existía ningún tipo de anomalía en ellos, ni siquiera tenían problema físicos que hallan obligado a los pobladores a enterrarlos así.
"Contrariamente a la investigación anterior, nuestro análisis mostró que las personas con tuberculosis, anemia y escorbuto no eran [necesariamente] enterrados con prácticas antivampiras", indicó uno de los investigadores.
Aunque la interrogante sobre su tipo de entierro aún no fue constata, Magdalena Matczak cree que estas personas murieron repentinamente y no tuvieron ningún sacramento cristiano, por ello fueron enterrados de esa forma.
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