Un nuevo informe que complicaría aún más la situación del suspendido fiscal de la Nación Carlos Ramos Heredia, se empezaría a debatir a partir del próximo lunes en la Comisión de Procesos Disciplinarios de la Magistratura (CNM).Según se supo, en él se da cuenta de que hubo más de una estrecha relación entre Carlos Ramos Heredia y el presunto cabecilla de una gigantesca red de lavado de dinero.Donde la Fiscalía Suprema de Control Interno, puso su despacho al servicio de los intereses de Orellana, quien intentaba apartar de su camino a los fiscales que lo investigaban o denunciaban y que no se sometían a sus intereses ilícitos.Estos favores, de acuerdo a los colaboradores eficaces de la fiscalía, se hacían a cambio de cuantiosas sumas de dinero, que estarían entre los US$10 mil y US$30 mil mensuales.Esta plata, según los testimonios, era cobrada por César Ramos Torero, hijo del suspendido fiscal, quien iba personalmente a la oficina del propio Rodolfo Orellana, en la avenida Guardia Civil, San Isidro.Este documento es remitido por Pablo Sánchez, actual titular del Ministerio Público y recoge testimonios de colaboradores eficaces del caso Orellana.
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