Varios niños que se encontraban en el área de juegos de la pollería El Corralito, salvaron de morir durante el sangriento atraco en el que fue acribillado el comandante PNP Pedro Pablo Guerrero Gilbertti.
A ellos no les importó la presencia de niños y mujeres y, para demostrar que estaban dispuestos a todo, ingresaron al local haciendo disparos.
Uno de los proyectiles impactó en el techo. Unos centímetros más abajo hubiese llegado al área destinada para el juego de niños.
El supervisor de Seguridad, Pedro Santillán, informó que el comandante Guerrero no disparó su arma, pues era consciente del peligro por la gran cantidad de personas.
Tras el asalto, la pollería se ha convertido en un negocio fantasma, por la poca cantidad de comensales, pues a raíz de los últimos atracos, los dueños evalúan la posibilidad de cerrarlo.
HOY LO SEPULTAN
Mientras los agentes realizan las diligencias para capturar a los criminales, los restos del oficial Guerrero Gilbertti, serán sepultados a las 10:00 am de hoy en el cementerio Santa Rosa de Chorrillos. La familia exige atrapar a los homicidas.
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