Lindberg Cruzado
El procurador anticorrupción, Christian Salas, anunció que solicitó la detención preventiva del presidente regional de Ancash, César Álvarez, investigado por presuntos actos de corrupción y vínculos a casos de interceptación telefónica en la “Centralita”.
Incluye a seis colaboradores del presidente regional, entre periodistas y trabajadores de ese local, por asociación ilícita para delinquir.
PELIGRO DE FUGA
Explicó que formalizó su pedido ante el Ministerio Público, el mismo que se justifica por el peligro de fuga de los investigados y que puedan obstruir las investigaciones.
Comentó que el presidente regional había sido excluido de las investigaciones por el presunto delito de peculado por un hábeas corpus.
Señaló que esta investigación, archivada hasta en tres oportunidades, evidencia que se habrían destinado fondos públicos para una campaña en prensa contra la oposición.
Si el juez dicta la prisión preventiva, Álvarez podría ser detenido hasta nueve meses mientras dure el proceso.
“Existen pruebas que vinculan a Álvarez con los delitos en investigación, la pena que se le impondría superaría los cuatro años y hay peligro de fuga y obstaculización de la justicia”, declaró Salas.
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