R. Aronés / E. Gamboa / M. Aybar
El delincuente Carlos Timaná Copara continuó ayer acusando de nuevos y más graves hechos delictivos al capitán Gabriel Fuertes.
El pasado jueves, el oficial desmintió la versión del ex “Destructor”. Sin embargo, Copara agregó a su denuncia “nuevas perlas”.
Con patrulleros
Reveló que tras su fuga del penal, el pasado 12 de junio, lo “chalequeó” con dos patrulleros, que lo recogió a la altura del Metro de San Juan de Lurigancho y lo dejó entre las avenidas Tacna y Colmena.
Además que le dio armas, granada y chalecos antibalas porque pensaba fugar a Colombia.
Tiene videos con él
Manifestó que con Fuertes robaron joyerías y farmacias en el Jirón de la Unión mediante la modalidad de forado.
Dijo también que los unía un vínculo que hizo que el oficial lo lleve a reuniones en un local policial en el Centro de Lima. “Tengo videos de eso”, manifestó.
A modo de jactancia, aclaró que Fuertes no era el único policía en su banda. Agregó que otro de apellido Percovich también lo integraba.
Recordó que con el oficial cometió otros hechos delictivos el 20 y 22 de octubre del 2011, en el Cono Norte.
Envío carta
Timaná envió una carta a El Popular y entre otras cosas explica haber sido el primero en salir tras romper la soldadura de la plancha de metal de la pared. En ella exime de responsabilidad en la fuga al personal del INPE, a policías, abogados y miembros del Poder Judicial. Dice que “hubo exceso de confianza y de rutina”, aprovechado para evadirse.
Ante el fiscal anticorrupción Domingo Pérez, Timaná aseguró que una semana antes ensayó su salida. Indicó que no le revisaron al ingresar a la Sala de Audiciencias. Por eso se le hizo tan fácil escapar.
Fue sancionado
Timaná acusó a Fuertes de capturar a Lizbeth Ailin Meza Ramírez (24), para “salvar su pellejo” cuando iba a ser descubierto por agentes de la DIRIN. Indicó que su pareja Luz Cruz Fernández es también inocente.
El 2007, el capitán fue sancionado tras descubrirse un túnel para una fuga en el penal de Lurigancho.
De otro lado, sus vecinos no lo ven con buenos ojos. Lo acusaron de traer a su casa personas de dudosa reputación y cambiar de vehículos constantemente, además de montar diversos negocios.
Sí dispararon sus armas
La prueba de absorción atómica practicada a los cadáveres de Lindomar Hernández Jiménez, “Puerto Rico” y Edgar Lucano Rosas, “Lucano”, confirmó que ambos dispararon sus armas durante el operativo en el que resultaron muertos, en una casa en Comas.
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