Jochamowitz: “Montesinos es el personaje que da la clave de cómo funciona la corrupción en el Perú”

Hoy 24 de junio se cumplen 20 años de la captura en Caracas, Venezuela, del exasesor de Alberto Fujimori, Vladimiro Montesinos Torres. Por esta razón, el escritor y periodista Luis Jochamowitz, aceptó una entrevista con La República en la cual habló sobre su investigación acerca del exasesor.

¿A qué cree que se deba que a pesar del tiempo la figura de Vladimiro Montesinos siga destacando y resonando? Resuena porque es un personaje extremo, porque el fujimorismo no ha desparecido, porque creó una especie de escuela, de corriente y de antecedente.

¿Cómo describiría la infancia del Montesinos? ¿Considera que la influencia de su padre y la carta que le dejó al fallecer influyó en lo que sería después? Sospecho que tuvo una infancia muy triste. En realidad, casi no tiene vida familiar ni personal, casi siempre ha sido un personaje del Estado. Desde alumno de colegio militar, hasta ser militar y empleado del servicio de inteligencia, todo viene del Estado. Montesinos descubrió cómo apoderarse de determinadas estructuras del Estado para, desde allí, obtener poder.

En cierta forma es como nuestro Hammurabi, pues el que codifica las leyes. Vladimiro Montesinos codifica las leyes de nuestra corrupción. Es el que indica que si tú quieres conservar el poder, tiene que influir en el Poder Judicial, en tales magistrados, en tales salas. Es el personaje que da la clave de cómo funciona la corrupción en el Perú.

En su libro usted menciona que existe una clase de dependencia entre Alberto Fujimori y Montesinos, pues uno no puede estar sin el otro. ¿Qué tan cierto fue esto? Fue un hecho, Alberto Fujimori comenzó como un populista de centroizquierda y tuvo varias facetas, pero lo único que no cambió nunca fue su relación con Vladimiro Montesinos hasta el final. Fue una asociación de dependencia, de complicidad. Ni siquiera se acusaron después, hasta ahora ellos guardan el secreto de cómo fue. Nunca han contado los detalles y pormenores de esos 10 años de relación cotidiana porque es muy incriminador. Ninguno de los dos quiere reconocerlo.

¿Los vladivideos marcaron un antes y un después de la historia de Montesinos y Fujimori? Fueron el detonante del Gobierno. Lo que fue muy importante fue ver los fajos de billetes. La gente se indignó muchísimo cuando vio en la pantalla los cerros de billetes. Eso fue un detonante y fue el inicio del videopolítico de la grabación clandestina que ha venido funcionando por 20 años, que nada existe si no está grabado y mejor si está grabado clandestinamente.

¿Considera una especie de ironía que Montesinos haya sido encarcelado en la celda que el mismo mandó a construir? Es muy irónico, es una especie de venganza poética. Él se encargó de hacer particularmente incómoda, no tenía inodoro, tenía una especie de silo, donde pones los pies y defecas en cuclillas. Las ventanas muy altas para que no puedas ver el exterior, todo hecho para joder, para torturar, para incomodar al inquilino y él termino allí. Es muy paradójico.