Policía en retiro asesina a soldador
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La canción "Volveré" del cumbiambero Tony Rosado sonaba en la rockola y el soldador piurano Julio César Navarro Camen (26) recordaba con nostalgia a sus padres y otros parientes de su natal Castilla, en el norte del país.
Disfrutaba del contagioso tema junto a su conviviente, Vanesa Amaya, sus dos hijos, además de otros familiares, en la cebichería “El Pez Norteño” de la Av. Universitaria 953, en San Martín de Porres.
En otra mesa, el suboficial PNP (r) Segundo Tarrillo Silva (51) departía con el especialista PNP Rodrigo Zamora López (45). Ambos miraban con desdén a Navarro y los suyos, pues estos querían escuchar huainos. Navarro había puesto en el reproductor siete cumbias seguidas, pero los agentes se burlaban de ese género musical, relataron familiares del finado.DISPARO EN LA CABEZAEran las 5:25 pm del último lunes y la tensión llegó al clímax en el local. El policía retirado se paró de su asiento y exigió al soldador que no ponga más música. Este no le hizo caso, pues no podía detener el aparato.
El agente Tarrillo Silva se llenó de ira, insultó al joven padre que no se amilanó, pues celebraba con su conviviente un año más juntos. Sus hijos, una niña de 6 y un pequeño de 3 años, observaban asustados la discusión.En pleno intercambio de palabras, Tarrillo extrajo su revólver calibre 38 y amenazó a la familia del soldador.
Navarro se fue encima del PNP pero recibió un disparo en la cabeza. Falleció horas después en el hospital Cayetano Heredia. El homicida y su colega fueron detenidos. La muerte impuso su fúnebre tonada
Agresor se defendió y dijo que lo quisieron asaltar
Para evadir su responsabilidad, el agente Tarrillo Silva dijo ante el fiscal en las instalaciones de la Divincri San Martín de Porres, que su víctima pretendió asaltarlo junto con sus demás familiares.
Sin embargo, los testimonios de los empleados de la cebichería, además de las pruebas balísticas desbaratarían su coartada, así como la del otro efectivo en actividad. Las investigaciones establecieron que el enfermero especialista Rodrigo Zamora, labora en el policlínico de Vipol, en el Callao, y tras asistir a trabajar a las 7:30 am del lunes, se retiró a las 1:30 de la tarde.
Está por establecerse si salió del trabajo con permiso o abandonó su puesto. Después se citó con Tarrillo y juntos fueron al “Pez Norteño”, donde libaron licor. Ambos fueron llevados al Ministerio Público y denunciados por el delito de lesiones seguidas de muerte y podrían pasar 25 años en prisión.
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