Consejos para reducir nuestra huella ecológica

Cada año el planeta gasta más de lo que tiene. En ocho meses ya consumimos todos los recursos que teníamos para todo el 2016, según la capacidad biológica de la Tierra para regenerarse.

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El cálculo está basado en la cantidad que puede producir la Tierra cada año. En el 2015, este día, llamado el Día del Sobregiro de la Tierra, llegó el 13 de agosto.

Si los humanos nos limitáramos a consumir dicha materia prima, nos acercaríamos al desarrollo sostenible. Pero, esto no sucede así.

La organización encargada de este estudio,“Global Footprint Network”, indicó que el último 8 de agosto, la humanidad agotó todo lo disponible para este año.

Para hacer este cálculo, la ONG tiene en cuenta la huella de carbono, los recursos consumidos para la pesca, ganadería, agricultura, construcción y el uso de agua.

Hay muchas formas sencillas para reducir la huella ecológica como por ejemplo:

Reutiliza los envases. Lleva tu propia bolsa cuando vayas a comprar. El plástico tarda tanto en biodegradarse, que actualmente convivimos en la Tierra con todo el plástico fabricado desde 1909.

Repara lo que se rompa. El sistema te invita a tirar y comprar, pero eso no es bueno para el planeta. Rompe el ciclo consumista.

No tires a la basura. Productos peligrosos o tóxicos. (fluorescentes, pilas, pinturas, radiografías, aparatos eléctricos, etc.) llévalos a un punto para su tratamiento correcto.

Recicla el papel. Usa las dos caras, cómpralo reciclado o 100% libre de cloro. Reducirás el consumo de agua, petróleo, las emisiones de CO2 y evitarás la tala de muchos árboles.