Asesinado director de penal El Milagro vivía amenazado

Karen Solís

Trujillo. El penal El Milagro lucía ayer agitado. Policías y agentes del INPE buscaban por todos los medios saber quién ordenó desde su celda el crimen del director Jorge Izquierdo Quijano. 

Su familia, en tanto, rompió su silencio y sobreponiéndose al dolor, confirmó que le habían quitado la seguridad personal pese a que el funcionario recibía amenazas desde julio último.  

“Se confió mucho y no le mencionó nada a su esposa   para no preocuparla”, dijo una sobrina suya. 

Para su viuda, María Ventura Meléndez, la muerte de Izquierdo obedece a una venganza por las constantes requisas que dejaban “mudos” a los extorsionadores. En la última, el pasado viernes, se incautaron 30 teléfonos, dos de ellos con mensajes extorsivos. 

“Espero que las autoridades hagan justicia y se esclarezca todo. La muerte de mi marido no debe quedar impune”, precisó.

PRESINTIÓ SU MUERTE 

Hace una semana, Izquierdo Quijano habría presentido su muerte y, en medio de una reunión familiar, manifestó: “Si voy a morir, que sea cumpliendo con mi labor”.

Para la policía, esta versión indicaría que el autor intelectual de su muerte lo presionaba para hacerlo desistir de su política de requisas y traslados. 

Sus deudos se quejaron además que, tras tener seguridad policial, le fue retirada sin explicación alguna. Pese a ello, Jorge Izquierdo no temía y se desplazaba tranquilamente. 

Detectives llegados desde Lima iniciaron las investigaciones para esclarecer el crimen. En esta no descartan incluso, la participación de algún trabajador que conocía los movimientos del occiso.

MUCHOS LOS DESPIDEN

El cadáver del director del penal El Milagro, era ayer velado en la iglesia San Lorenzo, en pleno centro de la ciudad.  Sus deudos, amigos y personas que trabajaron con él, se acercaron para darle el último adiós. El jefe del INPE también acudió.