Coronavirus en San Valentín: Así se celebra el amor en tiempo de epidemia [FOTO]

El coronavirus de Wuhan alteró por completo el desarrollo de la vida social en Asia. Son innumerables los eventos por “San Valentin” que se han cancelado para evitar que esta estraña neumonía continúe contagiándose por el mundo.

Las parejas chinas que querían darse un capricho por el “Día del amor y la amistad” deberán renunciar a sus planes o al menos buscar otros más caseros por la epidemia, que ha tirado por tierra las ilusiones de quienes anhelaban cenas en restaurantes de lujo o escapadas románticas.

Es difícil ver carteles promocionales de restaurantes o agencias de viajes en las desiertas calles de Pekín, donde tan solo algunos establecimientos, que se resisten a unirse a la oleada de cierres temporales, siguen adelante con sus ofertas, aunque en ocasiones se vean obligados a reducirlas al ámbito de los pedidos a domicilio.

Por ejemplo, las autoridades chinas suspendieron los viajes en grupo para tratar de evitar la propagación del virus, pero las agencias tampoco reciben peticiones de parejas..

A pesar del temor que hay por contraer esta infección, diversas fotografías han documentado cómo los chinos continúan dándose muestras de afecto, inclusive dándose besos en la boca con mascarillas.

Las imágenes de estos besos con mascarillas muestran a las parejas en espacios casi vacíos a su alrededor. Tan solo en la víspera al “Día de San Valentín” se reportó que iban 1.367 fallecidos y al menos 60.000 infectados en China continental. El temor por el contagio es evidente.

PLANES ARRUINADOS POR EL CORONAVIRUS

Una joven pareja compró un viaje completo por toda China, pero tras la epidemia de neumonía viral, por el miedo al contagio, no se atrevieron a salir de su hospedaje. Otros enamorados pasan el día en casa de sus padres y utilizan el día para divertirse con juegos de mesa.

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Algunos amantes de la música se resignaron a la cancelación de sus respectivos conciertos y deciden pasar el día comiendo en los pocos restaurantes que están abiertos. Mientras que otros aprovechan el momento y deciden cancelar sus pedidos en línea por temor a ser contagiados por el repartidor.

La peor parte se la lleva las empresas de flores, que han tenido una caída del 70%, tras la ausencia de millones de personas que no han retornado a la capital para evitar la enfermedad.