Día Internacional de la Enfermera: la revalorización de su trabajo ante la COVID-19

Desde que se propagó el coronavirus en el mundo, lo que devino en la pandemia que ahora afrontamos, un trabajo se convirtió en uno de los más importantes y esenciales: la enfermería. Hoy, en su Día Internacional, el arduo oficio de las enfermeras ha recobrado la importancia que siempre debe tener y que jamás debe desvanecerse.

Lucia Pardo Alva, directora de la Casa de Reposo Oasis, es un vivo ejemplo de la faraónica labor de la enfermera en la pandemia. Ella cuenta que, al igual que sus colegas, su vida cambió radicalmente por el virus. Asimismo, lo más tormentoso que vivió fue la muerte de cada persona en cinco minutos, situación que hizo enviar un mensaje reflexivo para que la ciudadanía tome consciencia sobre esta enfermedad.

“A los inicios muy difícil, complicado, por esta nueva manera de de vivir: con nuevas regalas que se tenía que adoptar no solo en el trabajo sino en la calle y el hogar”, dijo a El Popular.

Un detalle no menor es que Lucia Pardo confiesa que a lo largo de la pandemia ha sido incómodo el traje de trabajo. “De pronto tenías que estar tres veces más protegida que las demás personas; incomodidad total para trabajar”, cuenta.

Y no solo con el tema del vestuario, sino que Pardo agrega que otra de las complicaciones que tuvo se debió al tema de la alimentación: “Muchas veces -estuve- sin alimentos por temor a contagio. Aún así tenía que seguir, por la la demanda de pacientes y la atención urgente que ellos lo necesitaban”.

“Si hay mejoría porque ya se puede detectar a tiempo la enfermedad y las personas ya están siendo responsables de sus actos y van de inmediato al centro de salud al primer síntoma que detectan”, señala sobre la evolución del trabajo.

Para Lucia Pardo, muchos pacientes que no pudieron ganarle la batalla al coronavirus, dejaron en ella “un gran vacío de la noche a la mañana”.

Cuando se le preguntó a Pardo si ¿las enfermeras han sabido hacerle frente a la pandemia desde su trabajo? Ella respondió: “Si , porque muchas se fueron formando y preparando para todo tipo de situaciones, tanto en lo laboral y en lo emocional”.

Pardo se sincera y recuerda que a inicios de la pandemia, como era de esperarse, se pensó que sería imposible sostener la demanda de pacientes.

“Sí, en los primeros meses de la pandemia cuando todavía no había un monto específico para los contagiados y los hospitales colapsados de pacientes solicitando atención inmediata era deprimente enfrentar esta situación”, señala.

Cuando se le pregunta a Pardo si el labor de la enfermera en esta pandemia se ha revalorizado, ella responde con mucho entusiasmo, lo que demuestra lo importante y necesario que es su trabajo para salvar vidas.

“Sí, porque la enfermera es la persona que está directamente en contacto con el paciente las 24 horas, y es una atención integral la que realizamos en todo momento en conjunto con todo el personal de salud”, indica con mucho fervor.

Antes de despedirse, Lucia Pardo deja un mensaje a la ciudadanía para reflexionar en medio de esta crisis sanitaria que golpea al país y al mundo, en la cual se han perdido muchas vidas y el dolor aún persiste en millares de familias.

“Que se cuiden, que no hay que subestimar este virus. Después de pasar un año casi con esta pandemia. de presenciar que cada cinco minutos fallece un paciente, es doloroso; por eso, a cuidarse mucho con todas las medidas de protección que el gobierno indica cada momento. Gracias”, se despidió.