Luigi Carbajal: “Soy un papá celoso”

Mirian Pachas L.

Fotos: Arturo Pérez C  

Luego de vivir penas de amor al lado de Dorita Orbegoso, Luigi Carbajal asegura que la única y verdadera dueña de su corazón se llama Daleshka, su hija de 15 años. 

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El cantante y ahora bailarín de El gran show fue un papá precoz, porque tuvo a su hija cuando solo tenía 19 años.

Por aquel entonces era integrante de Skándalo, así que la noticia remeció el agitado y bullicioso mundo de la tecnocumbia. Además, casi le cuesta el puesto dentro de la agrupación. 

El tiempo transcurrió y Luigi se ha convertido en padre y madre de Daleshka y Gian Piero, su hijo menor de 14 años. El trío, que más parecen hermanos por la poca diferencia de edad, llegó hasta El Olivar de San Isidro para posar para el lente de el Popular por el Día del Padre.

—Fuiste un papá precoz...

—A los 18 subí al cuadrilátero y a los 19 ya estaba debutando como papá.

—Obviamente tu primera hija no fue planificada...

—Daleshka sí, a pesar de tener una corta edad, yo sí quería ser padre.

—Las fans de Skándalo te habrán odiado en ese momento...

—Sí, fue complicado, porque las chicas siempre quieren ver a su ídolo soltero. Y si eres joven esperan que no tengas un hijo. Pero gracias a Dios supe reaccionar. Así que asumí mi rol de padre. Cuando me enteré de que mi pareja estaba embarazada me hice responsable y fui a hablar con sus padres de inmediato.

—Más que un papá pareces su hermano mayor...

—La verdad soy más niño que ellos. Pero cuando tengo que corregirlos soy severo, duro, trato de hablarles como un amigo. 

—Daleshka (15) y Gian Piero (14) están en una edad complicada. ¿Cómo haces para aconsejarlos?

—Es muy difícil, pues la adolescencia es la edad más complicada del ser humano. A esa edad empiezan a proyectarse sobre su futuro. Está el tema de los estudios y amistades. Si tienen buenas influencias todo bien, pero el problema es cuando aparecen las malas compañías. Eso puede atraer el alcohol, las drogas y el sexo. Yo trato, entre broma y broma, de decirles las cosas como son. Les pongo como ejemplo a personas que conocemos y les hago ver cómo han terminado por su mala cabeza. Les digo que todo se logra en la vida con estudio, responsabilidad, obediencia y humildad.

—¿Eres un papá celoso?

— Sí, ya me compré cuatro bates de béisbol y cuatro perros (risas). A Daleshka le digo que tiene que ser una persona independiente, que nunca dependa de un hombre, pues los hombres a veces podemos ser duros con las mujeres por la cuestión económica. Igual para Gian Piero, porque en algún momento va a tener que mantener a una familia como varón que es.

—¿Tus hijos viven contigo?

—Cuando me separé de la mamá de mis hijos, dijimos un año los bebés viven contigo y el otro conmigo, pero la situación económica de ella se complicó, para mí era más factible darle lo que yo quisiera y estar con ellos. 

—Es repetitivo escuchar en el mundo de la farándula los juicios por alimentos, ¿qué opinas de eso?

—Eso viene de casa. Mis padres me inculcaron que la responsabilidad es lo más importante, los niños no tienen la culpa de nada. Yo he tenido que jugar hasta fútbol para ganar dinero y darles de comer a mis hijos. Hubo tiempos difíciles que no había para nada.

—Tú convivías con Dorita Orbegoso, ¿fue traumático para ellos su separación?

—No quiero tocar mucho el tema, porque aún son niños mis hijos. Ellos tuvieron mucho cariño por esa persona, pero no les gustó que a Dora se le escapara la situación de las manos y los terminara involucrando en nuestro problema.  A mí me dolió muchas cosas que dijo, imagínate a Daleshka y a Gian Piero. Cuando pasó todo ese problema, yo me alejé de ellos un mes. No quería que me vean mal. Siempre quiero que vean a su papá contento. Ahorita estamos tranquilos y felices. Tratamos de aprovechar al máximo el tiempo. Estoy en una etapa de mi vida diferente a las anteriores. Sé lo que quiero en la vida.

—¿Y qué quieres ahora?

—Quiero ser un buen empresario (está próximo a inaugurar una mueblería). Antes inicié esa faceta por mi ex pareja, pero no pensaba en mí ni en mis hijos. Ahora todo lo que haga será para ellos. Quiero que vean a su papá como un buen ejemplo.

—¿Tus hijos tienen comunicación con Dora? 

—Hace tiempo hablaron con ella. Dora me pidió salir con los chicos. De pronto Luigi le pregunta a su hija: ¿Tú hablas con ella por Facebook? Ella responde que no puede opinar de eso.

—¿Les gusta ver solo o con pareja a su papá?

— D:Nos gusta más que esté solo.

G:Tiene más tiempo para nosotros.

—¿Qué cualidades debe tener su nueva chica?

— G: Debe tener un instinto maternal. Porque hay personas (Dorita) que no saben mucho y creen saber todo. p