“Moncho” Arismendi, cuando deje el fútbol: “Estudié mucho el café y ahora exporto”

Jesús Arismendi, conocido como Moncho, es un futbolista ya de 34 años que se inició en FBC Melgar y que ahora defiende los colores de Alianza Atlético.
Consciente de que está cerca de terminar su carrera con la pelota, decidió emprender otro desafío en su vida, la exportación de café orgánico. Y ahí va. 

• Sabemos que has estudiado para entrenador, pero tu destino después del retiro al parecer será otro, ¿no?
• He estudiado para entrenador, pero siempre pensé hacer otras cosas alejadas del fútbol en el que ya llevó 17 años, y he decidido poner un negocio de café orgánico.
• ¿Cómo ingresaste al negocio?
• Yo he estudiado todo el tema del café y por eso ando metido en lo de la exportación, ando bien, tengo una empresa de línea de café orgánico peruano.
• ¿Qués es café orgánico?
• El café orgánico es un tipo de grano que se ha cultivado sin el uso ni la aplicación de pesticidas sintéticos, herbicidas u otros productos químicos.
• ¿O sea, no se modifica?
• Así es, los granos tampoco se modifican genéticamente de ninguna manera para producir mayores rendimientos.
• ¿Y cómo haces que estás metido de lleno ahora en los trabajos de pretemporada de Alianza Atlético?
• Es complicado, pero puedo llevarlo bien con la ayuda de mi familia.
• ¿Entonces eres un buen catador de café?
• Siempre me gustó tomar un buen café y era un aficionado del que se pasaba para filtrar. Cuando iba a probar una variedad, me ponía a estudiar todo el mundo del café.
• ¿Se puede decir entonces que pasarás de ser futbolista a un exitoso empresario de café?
• Me ha gustado trabajar en lo que tengo talento y apasiona y el café es uno de ellos.

Guía de los chicos

• ¿Cómo te sientes ahora en Alianza Atlético, tu nuevo club? Eres uno de los más experimentados del plantel.
• En marzo cumplo 35 años, es una responsabilidad guiar a los más chicos, poner orden y disciplina. Uno debe ser el ejemplo, sabes que ya no puedes cometer los errores que cometías antes.
• El estar alejado de los escándalos es tu mejor carta de presentación, ¿no?
• Mucha gente me lo ha dicho y eso me enorgullece. A mí me criaron para ser respetuoso y disciplinado. Solo espero terminar mi carrera en el fútbol, campeonando.
• ¿Hasta cuándo piensas darle al balón?
• Te diré que cuando el 2021 tuve la rotura del tendón de Aquiles, que me alejó de los campos siete meses, vinieron a mí tantas cosas y dije, me recupero y juego un año más, pero me recuperé y me puse bien físicamente. Ahora en mí hay esa sensación de revancha y la idea es jugar hasta los 37 años.
• ¿Esperas que tus hijos sigan tu huella?
• Tengo dos hijos y hay un varoncito que está por nacer. Mi hija de 9 años, nada que ver con el deporte; mi hijo de seis, es muy aficionado al fútbol y es delantero. Me gusta acompañarlo a sus torneos como hacían conmigo mis padres. Ah, si no es jugador, va a ser comunicador, porque sabe los nombres de todos los futbolistas.
• ¿Qué has hecho en esta pandemia, cocinar, por ejemplo?
• Siempre cocino, porque desde joven me tocó estar solo.
• ¿Cuál es el plato que te sale mejor?
• El ají de gallina y las pastas.
• ¿No te da tiempo para limpiar la casa?
• Siempre he sido responsable de los quehaceres de la casa, me gusta barrer, lavar, planchar. ¿Lo ves mal? Ja, ja, ja.

Comienza su carrera

• ¿Qué recuerdos tienes de tu infancia?
• De los mejores, me crié en el distrito de Santa Rita de Siguas, en Arequipa, a los nueve años me fui a vivir a Paucarpata y a los 15 años me fui a probar al Melgar. Mis inicios en el fútbol fueron en el club Fogatas, del barrio Manuel Prado.
• ¿Tu crianza fue en el campo?
• La familia de mi madre vive en el campo y siempre voy para allá. Estaba en medio de vacas y variedad de frutos, pero por tema de estudios me fui a Arequipa. En Santa Rita conocí a Joel Sánchez.
• ¿Qué tal eras en los estudios?
• Intente ser un buen estudiante en el Colegio 7 de Agosto, que era de la Policía Nacional, y me gustaban los cursos de Historia, Geografía y Ciencias Naturales, y también jugaba frontón.
• Apareciste muy joven en fútbol profesional.
• Cuando tenía 15 años estuve en Melgar de Yanahuara, un año más pasé al Melgarcito, hice buenos buenos partidos y me promocionan al Melgar con el profesor Edgar Delgado, y el profesor Roberto Mosquera me ve y me da la oportunidad en el primer equipo. Ahí hice mi primer contrato profesional.
• ¿Entonces Mosquera tiene que ver mucho en el despegue de tu carrera?
• Fundamentalmente, me supo llevar, fue un guía, y me aconsejó mucho, sobre todo me hizo quemar etapas, y gracias a eso, me consolidé en el fútbol profesional.
• ¿Melgar siempre fue tu casa, pero estuviste en otros siete equipos?
• Soy arequipeño, soy melgariano, mi familia es hincha del Melgar, pero siempre me metí a la cabeza que yo iba a vivir del fútbol y que debía ser profesional, por eso, equipo donde fui siempre me identifiqué, quiero a los lugares y a la gente donde voy, me gustaba hacerme amigos de la gente de utilería y logística.
• Hay una deuda pendiente con la selección, ¿qué te faltó para llegar?
• No soy quién para decir qué me faltó, pero te diré que soy de las personas que con sus virtudes y defectos está en el lugar que le corresponde.