George Forsyth: “En Alemania recogía y vendía fruta”

Todo el mundo lo conoce como “Ken”, pero a él más le gusta que le digan “Blanco” o “Loco”.  

Lo cierto es que George Patrick Forsyth Sommer,  según se lee en su DNI, es el arquero titular de Alianza Lima, que pasea sus 187 centímetros de estatura no solo en el rectángulo verde. 

Sabe que el fútbol no dura toda la vida, de manera que tiene sus negocios, a los cuales ingresó luego de    hacer un “curso” de vendedor de fruta por cuenta propia.

De paso, es políglota, pues habla cuatro idiomas, viajó por todo el mundo porque su padre fue diplomático. Además, su madre es chilena y su hermana nació en Bulgaria.

VISIÓN DE FUTURO 

—Eres futbolista y hombre de empresas. Algo raro con el futbolista peruano, ¿no?

—Siempre estuve metido en los negocios. Cuando era pequeño y vivía en Alemania, salíamos a los bosques y cogíamos frutas y lo vendía. Gané mucho dinero y de ahí para adelante no paré. Hay que cambiar la imagen de que el futbolista peruano es vago. También tiene otras perspectivas. 

—Tienes una línea de ropa, una empresa de seguridad y un centro de alto rendimiento. ¿Cómo así te animaste a ponerlo?

—En Italia y Alemania vi cómo se trabajaba al respecto y aquí no había, por eso me animé a poner uno. Es el taller del cuerpo. 

—¿Te podrían ganar los negocios  y dejar el fútbol?

—Cuando uno maneja bien su tiempo puede tener las dos cosas. Yo tengo 31 años y todavía pienso seguir dándole al balón por lo menos unos nueve años más. 

—Siendo tu padre diplomático, ¿no se cruzó por tu mente seguir esa carrera en vez de ser futbolista?

—Si bien en mi familia no hay deportistas, el fútbol es lo mío. La Diplomacia no me jala. Lo “malo” de ser un hijo de diplomático es que constantemente estás viajando a distintos lugares y cuando estás haciendo amigos te tienes que ir.

TE LLEVO EN LA PIEL 

—¿Así como hay racismo contra la gente de color, también hay contra los blancos o “arreglados”?

—Sí, lo he sufrido en mi trayectoria como jugador profesional. En los partidos quiseron bajarme con insultos pero soy fuerte de la cabeza y eso nunca me golpeó.  

—Waldir Sáenz dijo que juegas en Alianza Lima porque eres “blanquito”.

—Siempre lo ha dicho, que tapo en Alianza por mi papá que es embajador y amigo de los dirigentes y porque soy blanco. Nunca faltan los que hablan sonseras y son envidiosos. Si bien tengo una buena posición social, soy siempre una persona humilde porque eso me inculcaron mis padres y nunca me escapé de eso. 

—Waldir dijo también que eres más cercano a los dirigentes que a los compañeros.

—Reconozco que la empresa de seguridad de Alianza es mía, pero hasta ahí nomás.Tampoco tengo firmado contrato con Alianza hasta el 2018 como dice Waldir, yo me quisiera quedar hasta el 2030 (risas). Por qué no van a los entrenamientos del equipo y le preguntan a los muchachos quién es George Forsyth y cómo se comporta. 

—El “Pato” Quinteros dijo que  en Alianza no tuvo amigos, ¿qué te parece?

—Lamentablemente quizá no conectó con ninguno de los 15 jugadores que quedaron del año anterior.  

—¿Qué esperas de Alianza este año?

—Como equipo grande tiene que pelear el título siempre y el que no está preparado no puede estar en este club.                      

EXPERIENCIA INTERNACIONAL

En 1997, George Forsyth, que aún era juvenil, se fue a jugar al FC Lannesdorf 07 de Alemania,  permaneciendo dos años. Luego, el 2002 estuvo en el plantel del Borussia Dortmund II y tuvo la ocasión de seguir, pero retornó al Perú y jugó por Atlético Universidad de Arequipa.