El animal que reemplazará a los humanos y dominará la Tierra: científico de Oxford plantea una teoría descabellada pero probable

¿Un mundo sin seres humanos? A lo largo de los siglos, se han planteado múltiples teorías sobre el fin del mundo y cómo los humanos podrían terminar por desaparecer ante la falta de recursos esenciales para su supervivencia, acabando así finalmente con la especie.

Este planteamiento ha generado otra pregunta: ¿Qué especie podría reemplazar al ser humano? Según Tim Coulson, profesor de biología evolutiva en la Universidad de Oxford (Inglaterra), en su libro The Universal History of Us, plantea un escenario inesperado donde la especie que reemplazaría a los humanos no son ni los simios ni los delfines, sino los pulpos.

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¿Por qué los pulpos serían la especie dominante de la Tierra?

Anteriormente, se creía que los primates serían herederos directos del control total de la Tierra ante una posible extinción de la humanidad. No obstante, en los escritos de Coulson se resalta que existe una serie de factores por los cuales terminarían igual que los humanos: dependencia de estructuras sociales y fragilidad ante cambios constantes de hábitat.

Ante este escenario, el científico propone mirar bajo el agua, indicando que el pulpo sería el candidato ideal ante un colapso de la humanidad, debido a sus rasgos inteligentes y una conciencia mucho más distribuida y adaptativa. Diversos científicos han realizado estudios sobre el comportamiento de los pulpos, donde los resultados revelaron una inteligencia superior a la de cualquier otra especie vertebrada. Entre los datos más relevantes se encuentran:

• Capacidad de resolver problemas complejos.
• Comunicación visual sofisticada.
• Sistema nervioso descentralizado y totalmente desarrollado.
• Curiosidad activa y manejo de herramientas.

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¿Es posible el desarrollo de vida inteligente bajo las profundidades oceánicas?

Coulson plantea un mundo sin humanos donde parte de los océanos presentan menos daño por la actividad industrial. En ese entorno, los pulpos podrían crear estructuras sociales mucho más complejas que las civilizaciones humanas a través del aprendizaje social o simplemente por la evolución de su especie.

Asimismo, existen estudios realizados en estaciones marinas de Australia y Nueva Zelanda, donde han logrado evidenciar comportamientos grupales de la especie Octopus tetricus, quienes demostraron habilidades nunca antes vistas: navegar laberintos, abrir frascos y reconocimiento de personas.

Si bien no cuentan con un esqueleto que les permita vivir en tierra firme, el científico de Oxford no descarta que, con el paso de los años, la especie pueda desarrollar nuevas adaptaciones impensables, tal como los peces evolucionaron hasta transformarse en anfibios con extremidades.

Finalmente, se plantea que el futuro de la especie podría terminar en el desarrollo de estructuras y sistemas de comunicación a través de la bioluminiscencia, junto a la creación de tecnologías o herramientas diseñadas para el mundo marino. En la actualidad, científicos ya utilizan sistemas de biomecánica inspirados en los pulpos para el campo de la robótica, prueba viviente de que la naturaleza puede inspirar soluciones hacia el futuro.