Muchas veces por la falta de tiempo o la dejadez permitimos que la grasa se impregne en la cocina, ya sea pegándose en las paredes, mayólicas, artefactos, ventanas, en la cocina o el horno. Y mientras más pase el tiempo, más difícil se hace quitarla.
Sin embargo, para todo hay solución y quitar la grasa no es una tarea imposible, por eso aquí te dejamos algunos trucos o remedios caseros que pueden ayudarte a dejar tu cocina súper limpia y radiante.
Con vinagre blanco
Vierte una taza de agua caliente, una taza de vinagre blanco, el jugo de un limón y un chorrito de jabón líquido de platos en un frasco. Agita bien la mezcla para que se integren los elementos y aplícalo en todas las superficies que presentan textura grasosa como azulejos, paredes, encimeras o incluso en los armarios.
Después, tan solo debes esperar unos minutos para que el limpiador haga su efecto y retirar el producto con una bayeta semi-húmeda.
Con bicarbonato de sodio
Mezcla de agua y bicarbonato de sodio en un bol o recipiente hondo. Luego, aplica la mezcla sobre la superficie que desees limpiar y frota con una esponja. Deja reposar y enjuaga.
Con residuos del café
Lo único que debes hacer es frotar la sartén con los posos del café durante un par de minutos y, luego de apartar los restos, aclarar con abundante agua caliente.
Con jugo de limón
Tienes que rociar con zumo de limón las superficies afectadas por la grasa y dejar actuar de 5 a 10 minutos. Luego, con un trapo húmedo limpia y seca bien la superficie.
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