El perro es conocido por ser el mejor amigo del hombre. Sin embargo, existen algunos hábitos de tu parte que le molestan y tú ni siquiera te has dado cuenta. Muchos de estos hábitos están relacionados con la forma de ser natural de los perros y otros se deben a que sus sentidos son más sensibles que los tuyos.
Otros, sin embargo, son malos hábitos que algunos dueños tienen.
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Por ello, sea cual sea la razón, acá te presentamos una lista de las cosas que le molestan a tu mascota de ti. ¡Tenlo presente!
Los perros odian de ti que no les escuches: que estén durante largos minutos diciéndote qué quieren conseguir de ti, que se pasen meses pidiéndote que ese perro, esa calle o ese vecino no les gusta y aun así les ignores. Todos debemos hacer un mayor esfuerzo por entender las señales del calma y las señales de estrés en nuestros perros para entenderles mejor.
No le hables como si fuese un niño pequeño, sino como a un perro: un animal inteligente que entiende palabras e intenciones, pero no largos discursos ni reproches. No olvides que su sentido más fuerte es el olfato, así que ayúdale a disfrutar de él. Tampoco olvides que sus mejores amigos deben ser perros, y que la vida social para tu perro es tan importante como la tuya para ti.
Las correas que van atadas a los collares duelen y pueden provocar problemas de salud. Tanto si tu perro es grande, como si es pequeño, si tira de la correa o no, agradecerá ir cogido de un arnés y no de un collar.
Salir a la calle es uno de los momentos más emocionantes del día: no lo estropees añadiéndole, a cambio, un dolor permanente en la garganta. Es mucho mejor agarrar al perro de partes duras de su cuerpo: el esternón o las costillas.
Otra de las cosas que los perros odian de ti es que, además del dolor en el cuello y la sensación temporal de estar ahogándose, no pueda pasear tranquilo sin llevarse varios tirones. Un tirón en un arnés duele, pero en el cuello es mucho peor: se ramifica el dolor por todos los nervios hasta las patas traseras.
El sentido más sensible y desarrollado de los perros es el olfato. Se dice que su nariz es 1 000 veces más potente que la humana: sienten muchos más olores que nosotros y, por lo tanto, los sienten de manera muy intensa.
Cuando utilizamos detergentes perfumados para los humanos, estamos saturando y agrediendo la nariz de los perros. Cuando limpiamos la casa y dejamos un rastro de perfume químico, también estamos interfiriendo con sus instintos.
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Un castigo es incómodo y desagradable, tanto para el que castiga como para el que es castigado. Además, la mayor parte de las veces que castigamos a nuestro perro, él no sabe por qué lo hacemos. Desecha los castigos de tu vida porque es otra de las cosas que los perros odian de ti.
Nuestras casas y nuestras ciudades están hechas a la medida de los humanos: para los perros todo es grande. Las calles, los horarios y las costumbres están hechas para nosotros, y algunos perros pueden no entender o temer algunas de las cosas.
Hay muchas cosas diferentes a las que tener miedo viviendo entre humanos: los ruidos inexplicables de la calle, los autos, los vecinos, los ascensores, entre otros,y no siempre somos capaces de ver que nuestro perro le tiene miedo a alguna de estas situaciones tan cotidianas.
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