EE.UU: Niños de 7 años saben que la hipocresía está mal

Un revelador estudio en Chicago, Estados Unidos demostró que niños conocerían el significado de la hipocresía en la etapa primaria. Los investigadores descubrieron que menores de 7 años de edad comenzaron a identificar la hipocresía desde la conducta moral de una persona.

A diferencia de sus compañeros más pequeños, estos niños piensan que si una persona dice que robar es malo, este sería menos probable a que cometa el acto delictivo. Asimismo, piensan que si estas personas han robado, deberían recibir castigos más fuertes.

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“Nuestros hallazgos indican que los niños de esta edad están pensando críticamente sobre las personas que se representan falsamente de alguna manera”, precisó Hannah Hok, estudiante en la Universidad de Chicago. “Están pensando sobre la figura de la persona a una edad temprana”, agregó.

La investigación, que aparece en el periódico Child Development, se basó en una serie de experimentos realizados con más de 400 niños de entre los 4 y 9 años. “Los niños entienden cuando las palabras de las personas, cuando hablan sobre principios morales, son desentonan con su conducta actual deben ser castigados con mayor dureza”, indicó Alex Shaw, profesor de psicología.

En el primer experimento, los investigadores contaron el caso de dos niños que participaron, uno quien condenó el robo “robar es malo” y otro quien dio una respuesta moralmente neutral “el brócoli es horrible”.

Luego, los investigadores preguntaron a los menores que pronosticaran quién tendría más probabilidades de robar y qué robo debería ser castigado con mayor dureza. En todos los casos, los participantes de 7 a 9 años tenían más probabilidades que los niños más pequeños de 4 a 6 años de usar la condena como un predictor para acciones futuras.

Un experimento final, los investigadores presentaron a los menores dos casos: Alguien que elogió el robo y alguien que lo condenó. Tanto los niños mayores como los más pequeños predijeron que los primeros tendrían más probabilidades de robar, lo que indica que los niños pequeños podrían tener un particular dificultad al usar la condena como una señal de comportamiento.

Al entrevistar a los menores en un museo de ciencias de Chicago, Estados Unidos, los investigadores no recopilaron información demográfica; pero sí edad y género. Sin embargo, no encontraron mayores diferencias de género en sus resultados.

Shaw espera realizar más investigaciones sobre la conducta de los niños más pequeños y si pueden predecir mejor las acciones que son moralmente neutrales, como comer brócoli. Asimismo, espera examinar cómo el juicio de los niños pueden cambiar con el contexto social y cómo tratan la hipocresía que no beneficia al interloculor.

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“Eso puede que no sea falta de estabilidad, por sí mismos, que los niños estén reaccionando así”, indicó Shaw. “Creemos que participar en la hipocresía para beneficiarse así mismos provoca una reacción negativa”, agregó.