Un momento que nunca olvidarán. Un oficial de Policía de Chicago pensó que un conductor se quedó varado poco después de las 7 de la mañana de este domingo, Día de San Valentín, y fue a investigar, llevándose una tremenda sorpresa.
Al acercarse al lugar, el policía escuchó a la conductora gritar: “¡El bebé está saliendo!”. El peculiar regalo de San Valentín sucedió entre las carreteras Bessie Coleman Drive y Balmoral Avenue, a las afueras del Aeropuerto Internacional O'Hare, en Estados Unidos.
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Inmediatamente, el policía llamó a los paramédicos. Sin embargo, la mujer ya estaba en plenas contracciones de parto y no podía esperar a que la llevaran al hospital, según dijo el portavoz de la Policía Michael Carroll.
“El oficial estaba en el lugar correcto, en el momento correcto y pudo dar a luz a un bebé sano”, indicó Carroll. La madre, de 34 años, y el recién nacido fueron llevados al hospital por el Departamento de Bomberos de Chicago, donde ambos están “muy bien”, según el portavoz de la Policía.
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El oficial, un veterano de 25 años en el servicio, y a unas dos semanas de su jubilación, se negó a hablar con los medios de comunicación y dijo que preferiría dejar el centro de atención en la madre y su hijo, indicó Carroll. “Felicitaciones a la nueva madre y feliz cumpleaños al bebé recién nacido”, agregó el portavoz de la Policía.
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