Hace unos meses su salud de Iván Cruz se resquebrajó a consecuencia del temible COVID-19 y su vida llegó a peligrar.
Ahora más recuperado y ya en la tranquilidad de su casa, en el Callao, el querido cantante expresó su preocupación por su amigo y colega Guiller.
–¿Él no presenta mejoría?
–Me enteré que está malito, estoy en constante oración. Tengo una pequeña iglesia en mi vivienda y la utilizó para rezar por mi hermano Guiller y por todos, que pase de nueva esta epidemia que nos está matando.
–¿Y cómo vas con tu recuperación, después de ganarle al virus?
– Acá, no al cien por ciento, pero gracias a Dios me estoy levantado cada día mejor. Sigo con mis terapias.
–¿Has vuelto al canto?
– Sí, poco a poco, estoy sobreviviendo con mis shows y saludos virtuales que los hago desde el teatrín que construí en mi casa. Ahí tengo escenario y todas las facilidades para eso.
– Los artistas la siguen viendo negras...
– De todos los colores y esta pesadilla no tiene cuando acabar. Muchos colegas no han aguantado. Yo sigo con fe y la fuerza que me da mi Señor para seguir adelante.
–¿Hay Iván Cruz para rato?
– Claro, el diablo no me va a vencer, tampoco le doy motivos. Me estoy cuidando al máximo, salgo solo por emergencias de mi casa. Que Dios nos cuida a todos, a no confiarse.
Guiller sigue internado en el hospital de Vitarte y su estado es todavía delicado. “Está con respiración mecánica, no perdemos la fe”, dijo su hijo Guillermo.