Lo que iba a ser un sábado de discoteca y diversión, simplemente se convirtió en una noche bochornosa para Johanna San Miguel y su amiga Caty Sáenz, la popular “Mamacha”.La conductora y la productora de Esto es guerra llegaron con un grupo de amigos hasta la exclusiva discoteca Dragón Sur, en Punta Hermosa, para participar de la Fiesta de la Luna. Habría consumido bebidas alcohólicas y ello le terminó pasando la factura a la ex pataclaun.LEA TAMBIÉN: Nicola Porcella y Angie Arizaga se van a la congeladora por los escándalosTestigos presenciales revelaron a el Popular que conforme fueron transcurriendo las horas, San Miguel se quedó literalmente dormida en plena discoteca. Fue entonces que una trabajadora de limpieza, igual que varios de los asistentes, empezaron a fotografiarla y filmarla. Además de mofarse del estado en que se encontraba.Al percatarse de lo ocurrido, sus amigos le avisaron a la conductora de televisión. Ella despertó de inmediato y pegó el grito en el cielo.Luego presentó su queja ante el administrador de turno, que obligó a la trabajadora a entregar el chip a la también actriz.“Cuando le dijeron que la habían filmado, se le fue toda la borrachera y de inmediato le reclamó a la trabajadora de la discoteca de manera airada. Incluso la amenazó y le empezó a gritar para que borre las fotos”, comentó nuestro informante, que estuvo presente durante el lamentable episodio.HAY TESTIGOSPero el incidente no terminó ahí, pues otra trabajadora empezó a increparle a San Miguel por maltratar verbalmente a su compañera.Ante tanto escándalo, ella y sus amigos optaron por retirarse del local. “Fue un momento complicado, todos estaban preocupados en saber qué le pasaba a Johanna”, añadió el informante.
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