Fidel Valenzuela
En este caso, como se dice, el apodo le ganó al nombre. Le decían y aún hoy lo reconocen más por Agujita. Se trata de Alejandro Bassa, un sacrificado volante que paseó su fútbol y sus “pinchazos”, aunque él lo niega de forma rotunda, por nuestras canchas, y alguna del extranjero en los 80 y 90.
Hoy, busca talentos para Vallejo y los quiere hacer famosos, pero al mismo tiempo tiene muchas cosas qué contar de sus más de 15 años dándole a la pelota.
-¿De dónde sale el apodo de Agujita?
-Sale de un chistoso de la tribuna. Ya habíamos terminado un partido La Joya-San Agustín y me acusan de que había “pinchado” varias veces al Burro Ziani. Era 1987.
-¿Y el árbitro del encuentro qué dijo ante ese supuesto incidente?
-El juez era Enrique Labó y no dijo nada, porque no había prueba ni nada que me culpara.
-¿Todo quedó ahí?
- Qué va a quedar ahí, si hasta ahora me da bronca, porque me hicieron una denuncia, pero no fue el Burro Ziani, sino el abogado Mario Chávez Villanueva
-Supuestamente pinchaste a Ziani y el que se queja y te denuncia es Chávez.
-Sí, parece que más bien ese señor sintió la pinchada, ja,ja, ja...
-¿Pero no puedes negar que el supuesto pinchazo te hizo muy popular?
-Podría decirse que sí y hasta me quisieron llevar a Argentina para juntarme con Salvador Bilardo, a quien se acusó de utilizar una aguja cuando jugaba en el Estudiantes de La Plata.
-Hasta en Europa hablaban de ti...
-Llegó la popularidad hasta Inglaterra, país al que llegué por una invitación de mi compadre espiritual Nolberto Solano y viajé en un avión de primera. Recuerdo que Ñol me dijo que en esos lares era bien conocido y le respondí: “Ya ves, soy más internacional que tú”.
-¿No vas a decir que tuviste la ocasión de jugar por esos lugares?
-¿Qué crees?... Hice una pichanga en el Newcastle, pero tuve la mala fortuna de chocar con Alan Shearer, que me metió un frentazo que me sacó sangre de la nariz.
-No te quedaste tranquilo. ¿Le fuiste a dar el vuelto?
-Claro, yo ya quería fajarlo y hasta pensé meterle aguja, ja, ja, ja.
-¿Tienes una gran amistad con Ñol?
-Sí, es una gran persona y le gusta ayudar a la gente necesitada. Si contara todo lo que ha hecho por mí... Fíjate que hubo aquí un equipo, Nuevo Castillo, que en inglés es Newcastle, y siempre estuvo ahí dándonos la mano.
-Volviendo al tema de tu apodo, ¿es verdad que le metías golpe a quien te decía Agujita?
- Es verdad, al inicio me molestaba mucho porque había gente que creía la versión del pinchazo a Ziani, pero después lo asimilé y, para mi buena suerte, comencé a ser contratado seguido por varios equipos, cosa que en esa época era complicado.
-Una vez escuché decir que si pasabas por el detector de mentiras se descubrirán que mentiste al no aceptar tu culpa del pinchazo.
-Aceptaría, porque si hubiese sido culpable recibiría una sanción y nunca sería castigado. Lo que sí te puedo decir ahora es que estoy “aguja” (sin plata), ja, ja, ja...
-¿No vas a decir que desde ese incidente los rivales te miraban con otros ojos?
-Sí, pero no fue por ese incidente sino por mi temperamento. La marca que hacía era pesada y no me cansaba.
-¿Qué nos puedes decir de tus inicios?
-Salí de menores de Alianza, luego estuve en Cristal, de ahí pase al Atlético Chalaco, Defensor Lima, Huaral, CNI, Alfonso Ugarte, La Joya, Sport Boys, Pesquero, entre otros; y en el extranjero, en el Atlético Italiano, de Venezuela.
-¿Con Chalaco debutaste profesionalmente?
-Sí, en 1985. En mi estadía en Chalaco hubo jugadores que me ayudaron mucho, como Augusto Prado, Pozú, Ríos, Matías y Javier Chirinos, y los técnicos Hugo Montenegro, Roberto Chale y Edson Sánchez.
-¿Recuerdas qué hiciste con tu primer sueldo?
-Siempre quise ser profesional y pensaba en ganar dinero para darle a mi mamá una mejor tranquilidad. Le ayudé a construir la casita.
-Viendo actualmente cómo estás creo que es fácil que juegues un partido de fútbol completo. ¿Cuál es el secreto?
-El secreto es no “bombear” (tomar), no trasnochar, no fumar y estar metido en el deporte.
-Son 15 años que has jugado en primera, ¿puedes decir quién es el jugador más cargoso que te tocó marcar?
-César Cueto, con quien tengo una anécdota especial...
-Cuéntala....
-En un partido CNI-Alianza, me dijo: “Ven, sobrino, usted sabe que me han operado recién, ten cuidado”. Pero en una jugada me hace una huacha y un sombrero, y la gente lo aplaudía a rabiar. “Cueto, corazón “, gritaban.
-¿Qué hiciste?
-En otra jugada fui a “apretarlo” y en seguida se sentó. Lo sacaron lesionado. Yo tenía que morir en mi ley, el don que me dio Dios había que explotarlo, yo no era para driblar sino para “rascar”.
-De tu paso por Pesquero, siempre se habló de los intensos partidos de práctica entre ustedes.
-Nos enfrentábamos los blancos con los negros, ja, ja, ja...
-¿Y cuál era el premio?
-Ganarle a los blancos.
- Dentro del recuerdo de tus ex compañeros jugastes con pisqueños?
- Tuve la suerte de jugar en Atlético Chalaco con Angel Sabastizaga que era centro delantero de los buenos y con Isidro Fuentes en Pesquero donde pasamos un gran año.Como rivales tuve a los hermanos Fredy y Jesús Torrealva, Carlos‘Serpico’ Rivas, entre otros.
-¿A qué te dedicas ahora, Agujita?
-Trabajo para César Vallejo en la captación de nuevos valores y que triunfen en el fútbol. Quiero que sientan lo que significa estar en este deporte y se preparen para actuar en un estadio.
-¿No le enseñas a meter pinchazos?
- Ya pues no te pases, les brindó su apoyo para cumplir su sueño deseado.
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