Chorri Palacios confía que la bicolor le gane a Ecuador: "La selección debe despertar ahora"

Han pasado casi 17 años desde la última vez que, vistiendo la camiseta de la selección peruana, Roberto Palacios nos regaló un grito de gol. Su amor por la camiseta y entrega en el campo eran incuestionables. Hoy el Chorri sufre porque ve poco de eso en la bicolor que tiene el reto de ganarle a Ecuador en Quito para continuar con el sueño mundialista.

—¿Cómo analizas la derrota ante Colombia?
—Como hincha solo puedo decir que me entristeció mucho ver ese partido. Me dejó una preocupación enorme porque teniendo los mismos jugadores no pudimos repetir las buenas actuaciones a las que nos tenían acostumbrados.

—¿Qué faltó?
—No sé, pero parecía otro equipo, no hubo entrega. Por eso Lapadula resaltó tanto porque entró y en 15 minutos mostró más corazón que todos los que estaban en el campo.

—Y eso que Lapadula fue resistido al inicio.
—¡Exacto! Míralo ahora. Es un jugador que se nota que tiene vergüenza deportiva, y les tapó la boca a muchos, no ahora, desde la primera vez que le dieron también creo 10 minutos. Espero que se le abra el arco.

—¿Te sientes identificado con alguno de los jugadores?
—Difícilmente. Yo sé que estos chicos quieren la camiseta, pero a veces no basta con decirlo. Espero puedan encontrar el camino otra vez por que calidad y jugadores tenemos.

—¿Lapadula debe ser titular?
—Para mí, como para muchos, Lapadula debe ser titular. Paolo debe aceptar que al menos esta vez ayudará más al equipo desde la banca, no porque uno sea más que el otro, sino porque él (Paolo) llega de un proceso de recuperación. Ante Ecuador el partido será muy complicado necesitamos a los mejores.

—Se habla mucho de que Gareca es cabalero, ¿podría colindar con terquedad en sus planteamientos?
—No sé, nunca me dirigió, pero podríamos pensar que es cabalero y que quiere seguir apostando por los muchachos que llegaron al Mundial. Hay algo que es muy cierto, la entrega no se negocia y el técnico puede plantear el partido de muchas formas, pero los jugadores son los que necesitan darse cuenta de lo que están haciendo en el campo.

cuestión de actitud

—¿Crees que se debe reforzar el aspecto psicológico?
—No, mira. Puede que una vez sea importante, pero ¿varias veces? Los jugadores no lo escuchan. Te lo digo porque también he estado ahí. Cuando era futbolista también decían lo mismo y en las charlas la mayoría quería irse. Lo que se se necesita es que alguien vaya y les cante las cosas como son por el bien de ellos mismos.

—¿Estamos en la capacidad de ganarle a Ecuador en Quito?
—Sí, podríamos ganarles pero va a ser el doble de difícil. Que no se piense que vamos a ir a encontrar al mismo Ecuador de la última vez. Esta selección ecuatoriana ha mostrado evolución como la mayoría en Sudamérica. Así como nosotros queremos ir al Mundial, todas las selecciones también quieren llegar y la base será al menos tener actitud.

—¿Un empate es un buen resultado?
—Yo creo que sí. Traernos un empate de allá será un resultadazo.

—¿Un punto no nos alejaría mucho del objetivo?
—Vamos a ver cómo resulta, faltan muchas fechas, el equipo debe despertar ahora.

—¿Qué recuerdas de tu paso por Ecuador?
—Los mejores, el fútbol ecuatoriano es muy duro.

—Te tocó sufrir una goleada en Guayaquil con la selección
—Y fue terrible. Esa vez (Eliminatorias Francia 98) hice un gol porque al menos teníamos que mostrar dignidad. Espero al menos un empate y ojalá no les toque pasar por esa experiencia.

—¿Si se pierde sería momento de pensar en un reemplazo para Ricardo Gareca?
—Lamentablemente, es lo primero que se piensa. Pero más allá de lo que nosotros podamos decir, vamos a ver la reacción que tiene él. Ahora que soy técnico me doy cuenta de que es una presión enorme el decidir dar un paso al costado si no se dan los resultados.

—¿A Juan Reynoso le quedaría bien el buzo de la bicolor como DT?
—Ha ganado un título y es totalmente aplaudible. Es una opción, pero tenemos una más cerca. Roberto Mosquera está haciendo las cosas bien, hace rato, no solo acá, sino fuera, también eso es de aplaudir.