Miguel Torres recuerda que hizo locura por su amor al club: "En la 'U' jugué gratis porque Chemo me lo pidió"

Víctor Arrunátegui Acosta

Conocido en el ambiente futbolero como Cubito o Frodo, Miguel Ángel Torres Quintana (38), estuvo gran parte de su vida ligado a Universitario. Así, reconoce que tanto fue su amor por el cuadro crema, que jugó gratis cuando Chemo del Solar lo convocó para intentar sacar de la crisis al equipo, en 2010.

-¿Qué nos cuentas de tus inicios?
-Entre los 6 y 8 años estuve en una academia muy bien estructurada, como el Callegari de San Borja, donde los primeros meses del año nos llevaban a la playa a hacer pretemporada y en el resto, a participar en campeonatos de distintas categorías.

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- ¿Cómo llegas a la “U”?
- Mi padre, que es súper hincha de Universitario, me preguntó si me gustaría jugar ahí. Parece que tuvo algún contacto, fui aceptado y desde ahí el amor por este gran club se hizo más fuerte. Lo único malo era el camino largo hasta Fertisa, en el Callao. Ya después, cuando pasé a otras categorías, entrenaba en la Vidú, tomaba el “Maleño” para ir a Lurín.

- ¿Cómo das el gran salto al primer equipo?
-Me tomó de sorpresa. Recién había terminado el colegio (Nuestra Señora de las Mercedes) y tenía 17 años (1999), el profesor Roberto Chale me hizo debutar en el torneo Merconorte contra Barcelona en Guayaquil. Gustavo Grondona fue mi padrino.

-¿Padrino?
-Recibí de sus manos unos chimpunes, yo feliz por ese obsequio, pero ya en el epílogo de mi carrera me llego a enterar que él solo había sido un intermediario de Octavio Manera.

CREMA DE MI VIDA...

-Desde que debutaste los problemas económicos estaban a la orden del día, ¿no?
-Recuerdo que el 2002, en la época que no se tenía que firmar nada, me debían seis meses. Pero aquí lo que importa era jugar más que el dinero, porque vivía con mis padres.

-El 2003 te vas de la “U” y el 2007 volviste.
-Sí. El 2007 con Ricardo Gareca alcanzamos el título del Apertura y el 2009 el título nacional con Juan Reynoso, quien fue el mejor técnico que he tenido en mi carrera.

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-Pero seguían los problemas económicos, en ese sentido, ¿por qué te seguías quedando en la “U”?
-Chemo del Solar es quien el 2010 hizo que me quedara, me dijo que necesitaba jugadores-hinchas para salvar el club. Y en ese tiempo no pagaban nada, no había dinero.

-Una vez escuché que en esa oportunidad desechaste ofertas del exterior, ¿es cierto?
-Sí. Tenía ofertas de equipos de Irán y de Ucrania, pero me querían pagar menos que en la “U”.

-Ahora estás apoyando en el Proyecto Embajad(U)r.
-Me he sumado al Negro Galván como promotor. Fuimos nosotros a conversar con Rainer Torres, quien es el creador de este proyecto (junto a Aldo Miyashiro, pero después se retiró) para que nos cuente su objetivo. Nos pusimos a trabajar y le dimos aportes en cuanto al aporte empresarial. Ahí estamos a full en eso (ad honorem), se está comprando acreencias que son fáciles de demostrar.

TAMBIÉN ROSADO

-¿A qué se debe que le guardes un gran afecto al Boys?
-Tras salir del Bolognesi, tuve algunos problemas con mi empresario y me quedé sin jugar medio año. Toqué varias puertas incluso a la “U” y el único que me abrió fue Sport Boys (2004). De ahí radica mi cariño al cuadro rosado.

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- ¿Por eso asumiste unos años después la gerencia del cuadro porteño?
-Estaba cumpliendo mi año sabático, cuando recibo una llamada de Johan Vásquez para ser gerente deportivo cuando se encontraba en Segunda División. Salvamos la categoría.

- El año siguiente ascienden.
- Hicimos un equipo auspicioso, estaban Fano, Montaño, Faiffer, Crifford Seminario, Tajima, Tomasevich... En la presentación trajimos al Chapecoense y a mediados de años fuimos de gira a Estados Unidos, nos alojamos en el corazón de Manhattan, donde hacen las películas de suspenso, y cerramos ascendiendo tras ganar al Vallejo.

PERIODISTA

-¿Eres colega nuestro?
-Mientras jugaba en la “U” estudié periodismo en ISIL y ahora estoy siguiendo en San Ignacio de Loyola comunicación y publicidad.

- ¿Vas para más?
-Siempre he dicho que soy un eterno estudiante. He estudiado dos Máster de Gerencia Deportiva en  Johan Cruyff y en la actualidad soy funcionario de la Municipalidad de La Molina, donde fui elegido el mejor gestor deportivo y mi municipio quedó en primer lugar.

-Para terminar, dos cosas, ¿qué te quedaron inconclusas de tu carrera como futbolista?
-El 2009, cuando me rompí el tendón de Aquiles, se me esfumó la posibilidad de ir al extranjero, y también no haber dejado huella en la selección, ya que estuve en un momento en que era una trituradora de carne, pues eran más los partidos que se perdía que los que se ganaba.