Usain Bolt demostró una vez más que es el hombre más rápido del mundo. El ex atleta jamaiquino aceptó el reto de correr en una pista sin gravedad y la ganó con amplia diferencia.
En un evento en Francia de una conocida marca de champán, el ocho veces campeón olímpico se jugó su prestigio ante otros dos improvisados corredores a bordo del avión Airbus A310 con unas condiciones de gravedad cero.
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Y como no podía ser de otra manera, Bolt sumó otra victoria a su interminable palmarés.
En una pausa en su objetivo por convertirse en futbolista profesional, Usain Bolt dijo que se sintió como 'un niño en una dulcería' tras pasar alrededor de cuatro minutos en una condición ingrávida.
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