Madrid. El Real Madrid llegará al clásico del próximo 22 en el Camp Nou a un punto del Barcelona (65-64), pues ayer superó por 2-0 al Levante en la fecha 27 de la Liga española.Lo lamentable del encuentro es que parte del público que se dio cita al Santiago Bernabéu silbó a Iker Casillas y al técnico Carlo Ancelotti.El autor de los tantos a los 18 y 40 minutos del primer tiempo fue el galés Gareth Bale, duramente cuestionado en los últimos días por su baja producción de goles. Rompió el hechizo después de nueve fechas y lo festejó tapándose los oídos.La confusión llegó en el segundo gol porque el toque de Bale fue casi inapreciable y, encima, Cristiano celebró. De hecho, pese a que desde la megafonía anunciaron que había sido del galés, el público empezó a corear el nombre del portugués.RAMOS Y MODRICEl Levante no tuvo opciones de nada. Los últimos capítulos vividos en el Bernabéu, con Villarreal y Schalke adueñándose del partido y sacando a relucir las carencias tácticas del dibujo de Carlo Ancelotti, no se repitieron por la aparición de Sergio Ramos, inconmensurable en defensa, y Modric como cerebro de todo. El croata mejora a todos. De inicio provoca que el balón deje de quemar en los pies y mete una marcha más al fútbol que permite a los tres de arriba tener mayor protagonismo. También Keylor Navas fue titular, pero no tuvo trabajo.
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