Hugo Rodríguez
Trujillo. Salomón Libman Lleva más de diez años metidos en el fútbol profesional. En este tiempo dejó de lado muchas cosas, inclusive en su etapa juvenil por estar en la selección. Se perdió el viaje y fiesta de promoción de su colegio.
Ahora, a sus 29 años, Salomón Libman solo quiere hablar de César Vallejo –su presente– y ya no quiere que se le siga preguntando sobre Alianza Lima –su pasado–, afirmando: “Es un tema cerrado, de lo que me pasó antes no hablo”.
–Muchos piensan que la vida del futbolista es color de rosa, pero la realidad es otra, a veces se encuentra alejado de la familia, ¿no?
–Es por un tema de superación. Mi esposa está estudiando en Lima y cuando está libre viene con mis hijos. Ella me apoya mucho y eso se ve reflejado en mi rendimiento en Vallejo.
–Te han debido pasar muchas cosas, ¿de cuáles te acuerdas más?
–Hay anécdotas que uno pasa, como jugar el mismo día del cumpleaños de mi hijo y no he podido estar en la reunión o me la he pasado en la concentración.
–¿Otra?
–Para ir más atrás, no pude ir al viaje de mi promoción porque estaba convocado a la selección Sub 17. Por ese mismo motivo tampoco pude ir a la graduación. Mientras mis compañeros bailaban, yo estaba encerrado.
–Ese es el costo de ser futbolista, ¿no?
–Sí. Hay que cuidarse en todo, hay tiempo para ir a reuniones, al cine. En cuanto a mí, me esfuerzo y sé cuidarme porque quiero jugar varios años más.
UN BUEN “POETA”
–¿Cómo asimilaste tu paso de Alianza al Vallejo?
–No te niego que fue raro al comienzo. Pero el trato de la gente, el respaldo de la directiva y del comando técnico me ayudaron a consolidarme. Estoy teniendo un buen año, encontré mi nivel y regularidad y ello me sirvió para ser considerado en la selección.
–¿El factor económico primó para aceptar jugar por Vallejo?
–Son muchos factores, entre ellos, que es un club serio y que había formado un equipo sólido que persigue lograr grandes cosas. Vallejo ya se había interesado en mí en otras temporadas.
–¿Sientes nostalgias aún al recordar tu paso por Alianza?
–Para nadie es un secreto que soy hincha de Alianza, pero ya es un tema cerrado. De mi pasado no habló, ahora mi presente es César Vallejo y estamos luchando para lograr el campeo-nato.
ERA LA MASCOTA
–¿Cómo fueron tus inicios como arquero?
–Desde muy chico. Mis hermanos jugaban en Cantolao y me llevaban de mascota, y yo me iba detrás del arco. No podía jugar porque tenía cinco años. Luego me matriculé en la Escuela de Arqueros de Eseful.
–¿Y qué vino después?
–Jugué en una Copa de la Amistad con Sport Boys, mi entrenador era el profesor y maestro Rafael Asca, y me llegó a gustar el puesto de arquero. Luego me llevaron al Cantolao, a las divisiones menores. Después me hice profesional en Sport Boys y de ese club pasé a Alianza Lima.
–El de arquero es el puesto más difícil, no puedes fallar.
–Te digo que la presión es para todos, pero es verdad, la falla de uno es gol del rival.
–Están de modas los blopoers de los porteros. “Chiquito” Flores tiene varios. ¿Te pasó alguna vez?
–Son situaciones que le pasan a cualquiera, solo hay que estar con la confianza de hacer bien las cosas.
SU FUTURO
–Sabes que el fútbol no es eterno, ¿qué piensas hacer cuando te retires?
–Estudié Administración y espero sacar el título. En el futuro me veo haciendo empresa, pero...
–¿Pero qué ?
–Quiero poner una escuela de arqueros en Trujillo. No hay masificación, a pesar de que ahora se preocupan más los equipos por tener un preparador de arqueros.
–¿Qué tendría de especial tu escuela?
–Queremos trabajar desde el nivel formativo y competitivo. Tengo que ver el proyecto, ya en Lima lo hice y me fue bien, pero lo tuve que cerrar, es imposible, hay que estar cerca para interactuar.
–¿Y quiénes serían los profesores?
–Estoy buscando a los profesores ideales. Ellos se encargarán de los entrenamientos y yo estaré cerca para supervisar y enseñar también en todos los niveles de formación que se requiere para formar grandes arqueros. Quiero ver un arquero mejor que Libman (ríe).
–Estamos terminando la entrevista, ¿algunos sueños que deseas compartir?
–Tengo muchos, pero me los guardo porque sino, no se cumplen (risas...), pero comparto el sueño de todo Vallejo: ser campeón del Descentralizado. Y también llegar con la selección al Mundial de Brasil 2014.
RESPALDA A RAÚL FERNÁNDEZ
“Estar en la selección es importante, es lo máximo. Me siento contento con los llamados, ahora está Raúl Fernández como la primera opción y yo tengo que apoyarlo. Los dos trabajamos para estar preparados como si fuera uno a jugar”, expresó “Yuyo” Libman, quien tiene tres partidos en la era Markarián, siendo el mejor un amistoso con Ecuador, en el que atajó un penal a Ayoví.
Revisa todas las noticias escritas por el staff de redactores de El Popular.