A estas alturas de la vida, lo más probable, es que no haya ningún peruano que no haya probado el sabor de la bebida más famosa de nuestro país, la Inca Kola. Esta bebida se ha convertido en un requisito indispensable en la mesa de los peruanos acompañada de un buen plato de la gastronomía nacional.
Inca Kola guarda una historia llena de identidad que se encuentra muy ligada al Perú, el país que la vio nacer, a pesar de haber sido creada por ciudadanos extranjeros. Un sabor que endulza el paladar de todo aquel que se entrega al disfrute de esta bebida. Sin embargo, existe un detalle importante; la Inca Kola se comercializa en el extranjero, pero su sabor no es el mismo que la del Perú ¿Quieres saber por qué pasa eso? Te lo contamos en el desarrollo de esta nota.
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La tradicional gaseosa peruana no solo ha conquistado el paladar de millones de peruanos, pues también se ha ganado el corazón y el gusto en los ciudadanos chilenos. Sí, así es. Inca Kola llegó al mercado chileno ante la gran demanda de consumo por esta bebida.
Pero existe un detalle, el sabor de la Inca Kola en el Perú no es la misma en Chile, por lo que, la producción de esta bebida ha generado la curiosidad entre los consumidores. Expertos en el tema intentar dar una explicación a este acertijo y deducen que una bebida puede variar debido a la composición del agua y otros factores como la temperatura y la presión. Además de, adecuarse a las normas sanitarias y los gustos locales.
Han pasado 88 años desde aquel 18 de enero de 1935, en el que una pareja de extranjeros lanza la primera gaseosa Inca Kola con el lema “Inca Kola solo hay una y no se parece a ninguna”.
Según el portal Mercado Negro, la historia se remonta a 1910 cuando el matrimonio británico conformado por don José R. Lindley y doña Martha Stoppanie de Lindley llegan al Perú y se establecen en el distrito del Rímac para dar inicio a las operaciones de la Fábrica de Aguas Gaseosa de Santa Rosa, una empresa que se orientaba a la fabricación y comercialización de bebidas de sabores, un producto clásico de aquella época.
Todo aquel que ha probado esta bebida sabe que el éxito recae en su singular sabor, una fórmula secreta, que muchos afirman ser el de un chicle o caramelo cuando se les pide una opinión o definición de lo que han probado. Un propósito logrado por Lindley, su creador, quien tuvo en mente la intención de lograr un sabor y aroma no replicable y sobre todo, no identificable.
Periodista especializada en temas de actualidad, política y policiales. Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la UTP con más de 3 años de experiencia. Redactora web en El Popular y presentadora de "Capturados". Interesada en temas relacionados con misterios, películas y series policiales.