Niño suplica a delincuentes armados que no lo maten durante asalto en un restaurante en Villa El Salvador

Lo que parecía una cena tranquila en un restaurante de la avenida Carlos Mariátegui terminó en una escena de terror. Tres delincuentes encapuchados descendieron de una miniván blanca e irrumpieron armados en el local, donde se encontraban seis personas entre clientes y propietarios.

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En medio del asalto, un niño de unos ocho años se convirtió en el protagonista de una desgarradora escena: con lágrimas en los ojos, extendió las monedas que tenía en la mano el cambio de su pedido y suplicó a los delincuentes: “No me mate, señor”.

Imágenes que conmocionan

El momento quedó grabado en video de seguridad y muestra cómo la dueña del restaurante abrazó al menor intentando protegerlo mientras los criminales despojaban a todos de celulares, dinero y pertenencias.

Vecinos confirmaron que el pequeño no tenía vínculo con los dueños del local y que había acudido solo a comprar su comida. Su súplica refleja la indefensión de los menores ante la creciente ola de violencia en Lima.

Un testigo recordó otra frase que caló entre los presentes: “No tengo nada, ¿qué te cuesta?”, prueba del nivel de desesperación que se vivió en segundos.

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La inseguridad en cifras

La Policía Nacional del Perú reporta que los robos y asaltos armados en Lima se han incrementado en los últimos cinco años, aumentando la percepción de inseguridad en comercios, viviendas y espacios públicos. Casos como el de Villa El Salvador generan miedo entre los vecinos, quienes aseguran que “cualquiera puede ser víctima, incluso un niño que solo fue a comprar comida”.

Reacción de autoridades

La denuncia fue presentada en la comisaría de VES y la policía ya investiga la procedencia del vehículo usado en el atraco. Los videos de las cámaras de seguridad fueron entregados a las autoridades y también circulan en redes sociales, donde han despertado indignación nacional.

El Ministerio del Interior pidió colaboración ciudadana para identificar a los responsables, mientras especialistas en salud mental advierten sobre el impacto psicológico en menores que enfrentan escenas de violencia extrema.

El caso no solo evidencia la vulnerabilidad de la niñez frente a la delincuencia, sino también la necesidad de acciones urgentes para frenar la ola de asaltos en Lima.