Cusco al límite: exigen eliminar venta presencial de entradas a Machu Picchu por colapso turístico

La Cámara de Comercio de Cusco ha alzado la voz y exige al Gobierno eliminar la venta presencial de entradas a Machu Picchu, alegando que el sistema actual ha colapsado la experiencia turística, genera pérdidas millonarias y perjudica la imagen internacional del santuario.

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El presidente del gremio, José Santoyo Vargas, fue tajante: “El modelo presencial ha generado desorden, filas interminables, pagos en efectivo sin trazabilidad y un trato indigno al turista”. Además, denunció que este método contradice una resolución vigente que prioriza la venta digital de entradas.

Un sistema que retrocedió tras la pandemia

Antes de 2020, la compra de boletos era 100 % online. El regreso a la venta física, en cambio, ha traído efectos negativos: turistas que extienden su estadía solo para conseguir entradas, largas colas en puntos de venta y una logística caótica que ha desbordado al sistema local.

“El turista ya no disfruta Machu Picchu: lo sufre. Hoy paga en efectivo en boleterías improvisadas y gasta tiempo valioso que debería estar aprovechando en su experiencia”, señaló Santoyo a un medio local.

Turismo estancado y miles de empleos sin reactivarse

La Cámara de Comercio advierte que el flujo de visitantes aún no se recupera del impacto de la pandemia. Actualmente, el turismo en Cusco apenas alcanza el 78 % de los niveles de 2019, y aunque se proyecta llegar al 85 % en 2025, eso aún representa medio millón de turistas menos.

La pérdida no es solo simbólica. Según Santoyo, este déficit equivale a 17 mil empleos que aún no regresan, mientras otros países como Chile, Colombia o México ya superaron sus cifras pre-COVID.

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Acusan uso político de entradas y presiones sociales

Otro punto crítico es la forma en que se distribuyen los boletos presenciales. El gremio denuncia que una parte de las entradas es entregada a organizaciones sociales, lo que, en sus palabras, ha generado una “red clientelista” que usa los accesos como herramienta de presión.

“Cuando se intenta cambiar el sistema, surgen amenazas de bloqueos. Los boletos se han convertido en un instrumento de chantaje político, alejándose por completo de una gestión técnica y transparente”, afirmó.

¿Qué exigen los gremios turísticos?

Los operadores turísticos, tanto regionales como nacionales, piden que se derogue la norma que impone la venta presencial y se retorne a una plataforma 100 % digital, como ocurre en otros destinos Patrimonio de la Humanidad: Petra (Jordania), la Torre Eiffel (Francia) o Chichén Itzá (México).

Para ellos, volver a la venta virtual no solo garantizaría orden, trazabilidad y equidad, sino que ayudaría a reactivar un sector clave para la economía cusqueña.