Juliaca se convirtió en tierra de nadie durante las protestas realizadas el día de ayer, 09 de enero, que terminó con 18 muertos, 17 civiles y 1 un policía calcinado. De acuerdo con las investigaciones, los manifestantes atacaron tiendas, centros comerciales y edificios del Estado.
El primero en ser atacado fueron las tiendas aledañas a la plaza de Juliaca, luego se quemaron centros comerciales como Plaza Vea y Curacao. En ambas, los manifestantes la saquearon y se llevaron varios electrodomésticos.
Además, se llevaron camionetas de la tienda Pandero y destrozaron los exteriores del supermercado. Posteriormente quemaron la Aduna de Juliaca y destrozaron las lunas del Poder Judicial. También, quemaron basura y llantas en las pistas.
Otro grupo en Ilave, quemó la casa del congresista Jorge Luis Ancachi de Acción Popular. “Es terrible lo que le ha pasado a mi casa, me da mucha pena que escrupulosos atentaran contra mi casa”, dijo el congresista a Panamericana.
“Yo sabía que estaban planeando quemar mi vivienda. Las razones no lo sé, pero un tema discusión en las asambleas”, declaró.
Según indicó nuestro periodista en la zona, el saqueo se dio luego que los vándalos destrozaran la puerta de emergencia. “Es increíble amigos lo que está pasando en Puno. Pobladores locales, que no pertenecen a los aimaras han ingresado a Plaza Vea aprovechándose que la policía se ha retirado de la zona. Son aproximadamente 200 personas que están en el lugar”, dijo Liubomir Fernández periodista de La República.
De acuerdo con nuestro corresponsal en Puno, la PNP no solo habría dejado sin resguardo al centro comercial de Plaza Vea sino que también habría abandonado las instalaciones del Poder Judicial, la Fiscalía y la Aduanas.
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