Un incendio de código 3, de proporciones y fuera de control, se originó en una fábrica de estructuras metálicas la tarde de este lunes en el jirón Garibaldi, en La Victoria. El negocio de sillas metálicas, que quedó reducido a cenizas, no fue el único comercio afectado. Según declaraciones del jefe de la Cuarta Comandancia Departamental de los Bomberos, Mario Cassareto, media manzana a la redonda se vio afectada.
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"Esta es una fábrica de sillas de estructuras metálicas. Producto de la soldadura tienen balones de oxígeno que generan riesgo. Acá se originó y fue para allá. (Ha comprometido) todo lo que es Prolongación Huánuco, 28 de Julio y pasaje Garibaldi. Comprende media manzana", detalló.
Según indicó Casaretto, el inmueble donde se originó el siniestro era de cuatro pisos, levantado con calamina, y producto de la temperatura del fuego todo se ha venido abajo. La emergencia a las dos de la tarde ya había sido confinada. El jefe de los Bomberos especificó que era cuestión de un par de horas su control.
En el mismo pasaje Garibaldi viven los vecinos Víctor Bernardo y César Berrospi. El primero, quien lleva 30 años trabajando en la industria textil cuenta que en su inmueble almacena productos textil, lo que se ha visto afectado por el incendio.
"No puedo ingresar a la casa, todo se ha perdido, nos dedicamos solo a almacenar producto textil. No podría dar un monto o cifra exacta de la pérdida que tengo. Se ha pedido casi todo", narró a La República.
César Berrospi es otro vecino afectado, él cuenta que cuando se inició la emergencia escuchó a su padre gritarle que guarde su carro que se encontraba estacionado en su puerta, frente al inmueble siniestrado.
"De suerte mi carro no se ha incendiado. He querido moverlo pero no he podido, solo por el calor se ha hecho así. Son 10 mil soles aproximadamente en pérdida, yo lo uso para uso personal, quiero que (el dueño de la fábrica siniestrada) se tranquilice y me solucione la parte superficial, todo", dijo.
El señor Berrospi cuenta que hace solo seis meses hubo un amago de incendio en la fábrica, porque se prendió un colchón. Según dice, él ya hablado en algunas oportunidades con su vecino, para comentarle el peligro en que se ven expuestos, y recibió de respuesta que pronto el negocio ya no estaría ahí.
"Esta es una zona comercial, debería ser solo para venta pero hay fábricas de muebles, de madera, prendas, carpintería metálica…", detalla. El señor Berrospi pide a las autoridades un mayor control de los negocios en pasajes cerrados. "No deberían ser fábricas", enfatiza.
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