¡No se lo perdona! Tras el intenso encuentro que tuvo la alcaldesa de Ocoña, Marilú Gonzales, con la presidenta del Congreso María del Carmen Alva, dentro del Parlamento, esta se volvió a referir sobre las expresiones hacía su persona y reveló que en ningún momento recibió un mea culpa o disculpas por el trato frente a otras autoridades ediles.
Gonzales Porras, señaló sentirse atropellada, discriminada e incluso maltratada por los comentarios que llevó a cabo la titular del Parlamento. “Esta es mi casa y le exijo respeto”, manifestó Alva, al pedirle que baje el tono, declaración que fue asociada a un grito más que recomendación.
Como se recuerda, ambas mujeres se encontraron para hablar sobre los proyectos de ley en base a los municipios y la agraviada reconoció que habló enérgicamente, pero nunca faltó el respeto a ningún presente, ya que solo quería dar a conocer su malestar por el intento de derogar un decreto de urgencia.
“No es posible que quieran derogar un decreto de urgencia. Perjudicarían a 336 municipalidades, se irían en contra del pueblo”, señaló la alcaldesa a La República, quien aseguró que estas no solo serían un apoyo para luchar con el COVID-19, sino activaría la economía.
“No podemos tener una presidenta del Congreso como esa señora. Por eso estamos en los problemas que estamos, porque así se enfrenta y se pelea con el Ejecutivo. Los paganos somos los peruanos [...] Que Dios ilumine su mente para que no siga cometiendo esos abusos por tener el cargo de creerse y estar maltratando, y todavía mujeres iguales que somos”, finalizó.
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