Con la finalidad de reforzar los vínculos afectivos de los más pequeños de la casa, EsSalud recomienda aplicar la disciplina positiva en la forma de educar a los niños en base a amor, respeto y comunicación en medio de estos tiempos de pandemia.
La especialista en neuropsicología del Hospital Sabogal, Paola Albujar, mencionó que es posible llevar a cabo esta iniciativa sin recurrir al maltrato y gritos, muy por el contrario favorecerá el desarrollo emocional de los menores como el cariño.
5 principios básicos de la disciplina positiva
- La conexión emocional: Establece una comunicación horizontal, escuchar y comprender las emociones del niño sin juzgar ni cuestionar. Ayudarlos a reflexionar sobre su conducta, de manera que tomen conciencia de sus acciones.
- Ser respetuosos y alentadores: Ser comprensivos con los sentimientos de la otra persona y firmes al saber poner límites y tomar acuerdos.
- Entender el comportamiento: Ver que hay detrás de la conducta del niño. Puede estar frustrado, muy serio, que no manifieste sus sentimientos. Prestar atención ayudará a encontrar soluciones.
- Habilidades sociales: observar cómo se desenvuelven en el hogar y fuera de casa. Es importante que sepan organizarse, tomar decisiones siempre guiados de un adulto que les enseñe una disciplina positiva.
- Pulir sus talentos y capacidades: cada niño tiene diferentes talentos y capacidades. Hay que conocerlos para pulirlos y potenciarlos en el futuro.
¿Cómo se debería aplicar la disciplina positiva?
- Según la psicóloga de EsSalud, debería ser desde pequeños para que se le den responsabilidades y se realicen actividades.
- Los niños deben ver una familia organizada porque el niño observa el universo que lo rodea.
- Los padres deben trabajar en ellos mismos y recordar que son educadores.